El puente del Charco toma forma en Zalla para evitar inundaciones

Los cimientos del nuevo puente del Charco ya sobrevuela el cauce del Cadagua en Zalla. La Agencia Vasca del Agua, URA, ha instalado las vigas de 40 metros de longitud, y sin ningún apoyo sobre el río, que sostendrán la estructura del nuevo paso. Los trabajos forman parte del proyecto de defensa contra las inundaciones que la entidad viene desarrollando en el entorno del núcleo de Mimetiz.

La futura infraestructura vendrá a sustituir la pasarela peatonal y al puente para el tráfico rodado que se demolió en el pasado mes de agosto. El nuevo paso dispondrá de una mayor sección hidráulica, favoreciendo el paso del río, por lo que supondrá uno de los hitos más importantes de los trabajos realizados para prevenir desbordamientos.

El anterior puente se sustentaba sobre un pilar sobre el Cadagua que elevaba la lámina de agua, mientras que el nuevo permitirá el fluir de esta hasta con caudales previstos para avenidas en un periodo de retorno de 100 años.

El nuevo puente del Charco se suma a la otra gran actuación en el centro de Zalla, la construcción en curso de la llamada corta de Aretxaga que posibilitará la existencia de un doble cauce en el río durante los episodios de grandes crecidas. De esta manera, el entorno de las instalaciones deportivas municipales y el sector Aretxaga, donde se ubicaba el antiguo velódromo, se transformará ocasionalmente en una isla. Con ello también se consigue mejorar el comportamiento hidráulico ante las avenidas del río Cadagua a su paso por Mimetiz, e incrementar la seguridad ante las frecuentes crecidas del mismo.

URA ya ha licitado además las obras de defensa contra inundaciones aguas arriba del puente del Charco, en el tramo inmediatamente anterior. Se trata de un recorrido de 660 metros que comprende el espacio entre el puente del Charco y el meandro que se produce a la altura del apeadero de Feve, en el barrio de San Pedro. El presupuesto de esta actuación será de 4,2 millones de euros.

Los trabajos en esta zona consistirán principalmente en ampliar la sección de desagüe aguas arriba del nuevo puente. La intervención no afectará a las riberas que se encuentran en buen estado en el recorrido del río, sin embargo se conseguirá que las aguas puedan desaguar hasta las inmediaciones del puente sin generar ninguna afección.

La nueva adjudicación se produjo después de que se hiciera necesario modificar sustancialmente el proyecto inicial, que contemplaba todas las actuaciones dentro de una misma fase y contrato. Esto vino provocado por la aparición de indicios de terrenos contaminados, cuya gestión tuvo que ser incluida dentro de la actuación, mientras se llevaban a cabo las labores de acondicionamiento del entorno de la obra.

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