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La carretera que atraviesa Alonsotegi se hará más amable para el peatón

La carretera que atraviesa Alonsotegi se hará más amable para el peatón

El Ayutamiento acuerda la firma de un convenio para asumir la titularidad del vial de la Diputación, que invertirá 148.868 euros en su reforma

SERGIO LLAMAS

ALONSOTEGI.

Viernes, 15 de noviembre 2019

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La carretera BI-6351 dejará de ser una trinchera en el centro de Alonsotegi y se volverá más segura y transitable para los peatones. El Ayuntamiento aprobó ayer en un pleno extraordinario la firma de un convenio con la Diputación por el que un tramo de la vía pasará a ser de titularidad municipal, mientras que la institución foral asumirá el coste de los trabajos de reforma con una inversión de 148.868 euros.

La carretera se verá transformada gracias a la creación de pasos sobreelevados y a una limitación de velocidad más reducida para los vehículos. De esta manera los vecinos podrán cruzar con mayor seguridad a ambos lados de la misma en un céntrico tramo que se prolonga durante más de medio kilómetro.

En concreto, será un tramo de 580 metros en los que se actuará para «mejorar la conectividad transversal del tránsito peatonal, dotándole de una configuración más urbana mediante la adopción de medidas de calmado de tráfico», detalla el acuerdo. Además de los pasos sobreelevados, también se asfaltará la carretera, se renovará la parada de autobús y se colocará un nuevo semáforo.

Desde el Ayuntamiento de Alonsotegi reconocen que «la tranquilización del tráfico en esta carretera es una antigua demanda vecinal». El convenio con la Diputación se aprobó gracias a los votos de PNV y PSE, y la abstención de EH Bildu.

Demanda vecinal

No fue el único punto de pleno extraordinario de ayer. El Consistorio también acordó un gravamen del 0,4% para los llamados Bienes Inmuebles de Características Especiales (BICE). Este recargo se le aplicará a los embalses de Artiba y Nocedal, que suministran agua a los municipios de Barakaldo y Sestao, respectivamente. Este nuevo impuesto le permitirá recaudar al Ayuntamiento algo más de 11.000 euros anuales.

Esta tercera categoría de bienes inmuebles se introdujo en la actualización del castastro que la Diputación llevó a cabo el pasado año. Se dirige a los inmuebles que no están caracterizados como urbanos o rústicos, e incluyen entre otras localizaciones aeropuertos, presas, puertos comerciales, parques eólicos, embalses o centrales térmicas.

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