El secretario municipal advirtió al exalcalde de Bakio de que su actuación era «ilegal»

El secretario municipal del Ayuntamiento de Bakio ha asegurado que en 2008 advirtió a Txomin Renteria de que era «ilegal» retrasar la fecha de inicio del pago del canon que debía abonar a las arcas locales la promotora del fallido centro de talasoterapia en el paseo de la playa. El funcionario ha declarado esta mañana en la segunda jornada del juicio que se celebra en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Bizkaia contra el que fue alcalde de la localidad entre 1995 y 2011, que se enfrenta a penas de tres años y medio de cárcel, inhabilitación de 10 años para empleo o cargo público y una indemnización de 471.000 euros en concepto de responsabiliadd civil. Y, según ha desvelado Juan Francisco Eiguren, el exregidor le contestó que «había que hacerlo» porque en esta adjudicación se habían dado «circunstancias objetivas» que justificarían una demora de 13 meses en los abonos: el contrato no se pudo firmar hasta abril de 2008 porque hubo retrasos en la aprobación de las preceptivas autorizaciones de la Demarcación de Costas y de los departamentos de Medio Ambiente del Gobierno vasco. Por eso, a su juicio, «no me quedó más remedio» que firmar el contrato que reflejaba el mencionado cambio de fechas.

La vista oral busca determinar las posibles responsabilidades del antiguo mandatario local en el fiasco del proyecto para habilitar un innovador servicio médico basado en terapias médicas alternativas en el frente playero. La promotora nunca lo puso en marcha ni abonó el coste anual de 145.000 euros que le exigía el Ayuntamiento desde que le encargase la actuación en febrero de 2007. La institución local acabó rescindiéndole la adjudicación en 2012 y exigiéndole -amparada por una sentencia judicial- la devolución de la deuda de 471.000 euros que en estos años acumuló con las arcas locales por el «incumplimiento» de sus obligaciones.

El elemento central que esgrime la acusación en este litigio -representada por el Ministerio Fiscal y los partidos que estaban en la oposición en 2007, ANV y Aralar-, es que en el contrato el exalcalde habría ordenado cambiar la fecha en que la empresa debía pagar el canon municipal. Este documento se firmó el 7 de abril de 2008 y una de sus claúsulas contempla que la obligación tributaria empezaría a correr desde entonces. Sin embargo, esta actuación se había adjudicado un año antes en virtud de un pliego de condiciones que refleja expresamente que el inicio del canon estaba vigente desde febrero de 2007.

El secretario municipal ha avalado esta teoría. De hecho, ha subrayado que Renteria «me dio de forma oral las indicaciones», de los cambios que debía incorporar al contrato, y que se centraban en que la adjudicataria, la firma Talasoterapia Kiura S.L., no tendría que pagar nada hasta que iniciase la explotación del centro y siempre desde abril de 2008. Y el trabajador ha añadido que, a sus reticencias legales el exregidor le espetó que «había que hacerlo».

Eiguren, según ha confirmado, acató el mandato, pero redactó de forma previa un escrito contrario a los cambios incorporados al documento. No se trató, sin embargo, de un 'informe de reparo', práctica habitual en su cargo para mostrar sus discrepancias con el acuerdo municipal. El abogado de Txomin Renteria, además, ha remarcado que en ese documento no se habla de ilegalidades de forma expresa, sino de «discrepancias» entre el pliego de condiciones y el posterior contrato, circunstancia relativizada por el propio Eiguren. «Los que firmamos éramos conscientes de esa irregularidad», le ha respondido.