1.200 alegaciones contra la variante que proyecta la Diputación en Abanto

«Esta cifra refleja de forma clara y rotunda el rechazo generalizado de la población a una infraestructura que amenaza nuestro entorno, nuestra salud y nuestra calidad de vida. Especialmente significativo es el dato de que más de 800 alegaciones proceden del barrio de Las Carreras, el núcleo más afectado», destacó Itxaso Etxegarai, portavoz de Stop Variante.

La agrupación, que se presentó en el SAC del Consistorio con varias cajas llenas de alegaciones para que se registren antes este jueves –cuando finaliza el plazo–, denunció el «impacto ambiental, social y territorial» que supondría la infraestructura.

El proyecto acumula ya varios desencuentros. El rechazo ciudadano llevó a debatirlo en las Juntas Generales con el fin de seleccionar una alternativa acorde a las preocupaciones y a los criterios técnicos, doblando su coste de 17 a 31 millones de euros. El plan que hay ahora sobre la mesa propone un recorrido de 1,2 kilómetros a través de un falso túnel de 330 metros –entre el campo de fútbol y la depuradora de aguas– y un tramo en superficie, que se inicia y culmina en sendas rotondas. También contará con un puente de 68 metros en La Bárcena. Entre otras actuaciones, se colocarán pantallas acústicas con vegetación de 2,5 y 5 metros al margen sur de la variante para garantizar que no aumenta el ruido en las viviendas cercanas a La Trinidad.

La plataforma insistió en que se debería soterrar la variante al completo y no solo un tramo, como avala la Diputación en su propuesta. Argumentan que «haría el mismo daño ambiental que el planeamiento original» en zonas como la de la batalla de Somorrostro, un enclave histórico que el museo minero busca proteger. Otra opción, apuntó Etxegarai, es «la alternativa cero, es decir, no hacer la variante, pero sí mejoras en la carretera actual».