Padres de un colegio de Getxo demandan desde hace años cubrir los accesos y el patio

El edificio protegido lleva décadas sin reformarse ni modernizarse, tiene humedades e incumple las normas de accesibilidad, según denuncian desde el AMPA –asociación de madres y padres–. «La cuestión prioritaria es que se ponga un aterpe para que los niños no se mojen al entrar», comenta un progenitor «Estamos hablando de niños que, en muchos casos, no tienen autonomía suficiente como para salir del centro tapándose con un paraguas por sí mismos», añade Aitzol Gorritxo, representante del AMPA.

El problema del covid ha provocado que la entrada al edificio sea todavía más lenta que antes. «Las colas que se montan hacen que tardemos 20 minutos en salir o entrar del centro», se queja Gorritxo. La cubierta «se lleva solicitando por lo menos desde el año 2005. El centro también carece de patio cubierto donde el alumnado pueda salir a jugar los días de lluvia». Ya en 2018 se pidió desde la asociación y desde la dirección del centro la marquesina que nunca se llegó a colocar. «El cabreo es monumental», como relatan algunas madres. Obedece a que «entre el Gobierno vasco y el Ayuntamiento se tiran la pelota y aquí nadie hace nada».

Desde el Consistorio aclararon que habilitar una cubierta es competencia del Departamento de Educación del Ejecutivo autónomo. «El Ayuntamiento solo tiene competencia en lo relativo al mantenimiento del centro». La responsable de Cohesión Social, Carmen Díaz, indicó que la licencia para ese aterpe se concedió hace tres años. Pero la cuestión se complicó porque se ha habilitado una entrada lateral al centro, cuando antes era por la parte delantera, y la cubierta «ya no se puede poner al lado porque no se respetaría la distancia de cuatro metros al linde que obliga la ley», según explica la concejala. A eso añadió que Getxo ha puesto un protocolo en marcha en el que se recogen las peticiones de todos los colegios e ikastolas del municipio para obras a realizar en 2022, y que no constaban algunas actuaciones en San Martín, como la relativa a la accesibilidad. No obstante, Díaz aseguró que «comprende la situación de las familias» y que se reunirá con responsables de Educación del Gobierno vasco «con la voluntad de encontrar un acuerdo».

«El edificio no se ha tocado desde los años 80. No está actualizado y necesita una renovación», comenta Gorritxo, que no descarta el inicio de movilizaciones.