270 vecinos de Getxo pasan 23 horas sin luz por el incendio en un cuadro eléctrico

La rápida intervención de los bomberos y de la Policía Local evitó en todo caso que en un primer momento fuera a más. La densa columna de humo provocó momentos de tensión en la zona, hasta que se conoció que no había daños personales. El fuego, que se desató sobre las 9.45 horas, no se propagó por el edificio, más allá del cuarto en el que estaba el transformador afectado, y los residentes pudieron volver a sus casas pasadas las once de la mañana. Un niño tuvo que ser rescatado al quedarse atrapado en el ascensor.

Aunque no hubo que lamentar heridos, alrededor de 400 vecinos de la zona de Gobela sufrieron un corte de luz de once horas. 130 pudieron conectase al generador eléctrico por la noche.

Segunda interrupción en lo que va de semana, después de que el lunes el gran apagón les dejase sin corriente durante casi tres. La afección fue mayor. Personal de Iberdola se desplazó por la mañana a la zona para restablecer la electricidad a la «mayor brevedad posible», pero no fue posible y los trabajos se alargaron hasta ..., cuando se recuperó la normalidad. A las 16.00 horas los trabajadores de la empresa eléctrica instalaron un generador portátil con el que pudieron abastecer de forma puntual a algunos domicilios. Once horas después del incidente la mayoría de las viviendas permanecía sin suministro y diversas fuentes auguraban que la normalidad tardaría en recuperarse.

El abundante humo que salía de los contadores ubicados en la parte baja del edificio, obligó a cerrar las ventanas de los inmuebles colindantes. A Moisés, vecino del inmueble afectado, el incendio le pilló en la cama. «Hemos salido rápido, en pijama porque estábamos durmiendo y no he buscado ni zapatillas, ni nada, pensaba que iba a ser menos, nos han despertado, nos hemos marchado y aquí estamos esperando a poder volver», relató descalzó poco antes de que una agente de la guardia urbana le permitiese regresar a su domicilio.

Aimar, acababa de poner en funcionamiento un ventilador cuando le hizo un ruido «raro». «Luego se ha ido la luz, pensábamos que era otro apagón, pero hemos empezado a oler a quemado. Dice mi padre que si llega a ser en el poste eléctrico a saber hasta cuándo nos quedamos sin luz», comentaba junto a su pareja mientras esperaba detrás del cordón policial a poder regresar a su casa. «Al ver las imágenes y el vídeo nos hemos asustado mucho», relataba Ramón Goitia, otro de los vecinos del bloque afectado. «Hemos venido a la carrera para comprobar el estado de la casa. Al llegar e identificarnos nos han comentado que nos estaban buscando porque querían acceder al piso para comprobar su estado. A otra vivienda tuvieron que entrar rompiendo la ventana porque no sabían si había gente», afirmaba este inquilino. «Nos han acompañado en todo momento dos bomberos. Hemos revisado la vivienda estancia por estancia y han marcado que está bien», compartía aliviado. «La nube era tan densa... Por suerte, todo ha quedado en un susto grande».

Fermina Paredes, que regenta el bar Zokotxo, se tomó el segundo corte de luz en menos de cinco días con desesperación. «Otro susto que nos hemos dado, estábamos abiertos desde las ocho de la mañana para preparar las comidas que tenemos, las reservas, y aunque tenemos gas para cocinar, es un rollo porque ya hemos tenido que estar un buen rato en la calle», lamentó.

Cinco personas han perdido la vida y una decena ha resultado herida por incendios en viviendas de Bizkaia en el último año. La víctima más reciente fue una mujer de 73 años en marzo en Bilbao. Un fuego se desata cada día en el territorio, según datos de la Diputación.