«El comercio en Astrabudua es el corazón de este barrio erandiotarra»
La asociación de comerciantes celebra este fin de semana su aniversario 25 con una programación festiva
Este fin de semana, las calles del barrio de Astrabudua, en Erandio, se llenan de vida y color para celebrar un hito: el 25 aniversario de la asociación de comerciantes. Con actividades para todas las edades, sorteos y una gran dosis de agradecimiento, los vecinos se unirán a los comerciantes para festejar un cuarto de siglo de compromiso con el desarrollo de la economía del municipio. La planeación de casi seis meses ha resultado en una variada programación. Este sábado, a partir de las 11.00 horas, las plazas Josu Murueta y Mendiguren acogerán juegos infantiles, hinchables, un trikipoteo, una comida popular, la actuación del músico 'Cowboy', y en la noche, un DJ amenizará el cierre de la jornada a las 22.00 horas.
«Hemos querido que todo el mundo sea partícipe de esta conmemoración. Principalmente, los clientes, que son los que han estado con nosotros siempre», destacan portavoces de la entidad. Precisamente, para premiar el acompañamiento y la confianza, representantes de la asociación han repartido vales de descuento. Y también sortearán bonos de veinticinco euros entre los que hayan comprado en los establecimientos del pueblo este mes.
«El comercio local es mucho más que un lugar donde comprar. Es el corazón de nuestro barrio, un espacio donde nos encontramos, compartimos experiencias y creamos comunidad», asegura María Jesús González, la presidenta de la asociación integrada por más de noventa minoristas. Desde el principio, los miembros han rondado el centenar.
En 1999, unos diez comerciantes y hosteleros se dieron cuenta de que «la unión les daría más voz», relata Estíbaliz Rodríguez, quien estuvo a la cabeza de la agrupación durante ocho años. Sus padres fueron unos de los que se sumaron a la iniciativa pionera en el barrio. Entonces, los fundadores iban comercio a comercio, tocando la puerta para invitarles a vincularse. «El grupo, de forma persistente, se encargó de captar uno a uno al resto de los socios. Su esfuerzo y determinación fueron claves para sentar las bases de esta sólida organización», destaca.
Desafíos
A día de hoy, una de las prioridades es poner en valor el trato directo, la cercanía y la asesoría personalizada. De hecho, «la pandemia ya puso al descubierto la necesidad de estar mano a mano. Siempre hacemos campañas para resaltar este aspecto», indica González. Ella es consciente de que algunas acciones se enfocan sobre todo a impulsar la venta de productos y bienes, antes que a la oferta de servicios. Pero reconoce que: «un barrio que se mueve beneficia a todos los negocios».
De hecho, gracias a la labor de la asociación, se han logrado importantes mejoras para Astrabudua, no solo en el ámbito económico, como la peatonalización y el acondicionamiento de varias de sus calles. Justo en esa búsqueda de hacer un entorno más amigable y atractivo para todos. El caso de la actual presidenta es un ejemplo claro de las ventajas de ese dinamismo. Cuenta con una oficina de seguros, y sabe que cuando la gente acude a las tiendas o a los bares, pueden también interesarse por sus servicios.
Con el paso de los años, la entidad se enfrenta a nuevos desafíos con los cambios en los hábitos de consumo. Ante este panorama, los minoristas del barrio están convencidos de que la proximidad sigue siendo una opción valiosa para los clientes. «Para eso, la agrupación continuará trabajando en la innovación y la adaptación a las nuevas tecnologías, siempre con el objetivo de ofrecer a los clientes una experiencia de compra única y satisfactoria», remarca. «El futuro se presenta lleno de retos, pero también de oportunidades, y la asociación está preparada para afrontarlos con ilusión y determinación».