La Línea 4 de metro estará diseñada en julio pero sigue sin plazos de ejecución

«Cuando tengamos el proyecto tomaremos las decisiones», ha dicho Elixabete Etxanobe en la sesión de control celebrada en la Casa de Juntas de Gernika. Respondía así a una pregunta del PP que reclamaba concreción sobre los plazos del nuevo trazado del suburbano y si la obra está supeditada a lo que pase con la reforma de Abando y la llegada del TAV, que es para lo que se cambia la estación. «Son expertos en proponer pero no en dar certidumbre, y ya toca», ha reclamado el apoderado popular Pablo Gómez-Guadalupe.

De la Línea 4 comenzó a hablarse en la primera década del siglo. En 2009 el consejero de Transportes del Gobierno vasco, Iñaki Arriola -que ha vuelto a ocupar el cargo en el mandato recién terminado-, anunció el proyecto para ampliar el recorrido del metro desde Moyua hasta Rekalde. La crisis económica, el retraso de proyectos previos como la Línea 3 y la apuesta del Ejecutivo por otras infraestructuras mantuvo en un cajón el plan hasta que se retomó -y modificó- en la postpandemia. El trazado del suburbano partirá de Abando y llegará hasta Zorroza. Contará con paradas subterráneas en Irala y Rekalde, cuya ubicación concreta es uno de los asuntos que debe concretar el proyecto constructivo. Supondrán algo más de 3 nuevos kilómetros para la red de metro que requerirán una inversión de 289 millones y 40 meses de obras. Más de tres años.

En abril del año pasado, cuando los ingenieros se acababan de poner con el asunto, Arriola dio una primera pista de los planes de ejecución. Aclaró que el nuevo trazado se ejecutará «de una sola vez» aunque eso signifique que se tenga que esperar a que quede definida la nueva estación de Abando, donde coincidirá el inicio de la Línea 4 con la 1 y la 2, las Cercanías de Renfe y los trenes de largo recorrido. El proyecto para la entrada del TAV a Bilbao fue adjudicado el año pasado y debería quedar culminado, como muy tarde, en 2026. Luego, las obras.

Con este horizonte, Etxanobe solo se ha atrevido hoy a asegurar que en otoño «se resolverá si la fecha de inicio de la obra (de la Línea 4) está condicionada por Abando». En su intervención la diputada general también ha defendido que no existe parálisis y que las instituciones están «en marcha» con el proyecto y que tiene garantizado «el impulso económico» necesario.

El pleno de las Juntas Generales ha sido hoy también el último acto de Imanol Pradales como diputado de Infraestructuras. El candidato del PNV a la Lehendakaritza el próximo 21 de abril presentó su renuncia ayer y será cesado por el Consejo de Gobierno foral en su reunión de mañana. El nombre de su sustituto se conocerá dentro de una semana, según las fuentes consultadas.

Pradales, visiblemente emocionado, ha aprovechado su intervención en el pleno para despedirse. Ha expresado «el honor que ha sido trabajar por Bizkaia» y se ha mostrado confiado en haber dejado «un territorio mejor que cuando llegué. Tras doce años en el Ejecutivo vizcaíno, ha agradecido a los tres diputados generales con los que ha coincidido -José Luis Bilbao, Unai Rementeria y Elixabete Etxanobe- «la confianza», y también ha su partido por el nuevo reto que le ha puesto sobre la mesa. «Cuiden de esta casa», ha pedido a todos los partidos representados en las Juntas Generales, «un símbolo de las libertades vascas».