El Gobierno vasco se interesa por la compra de la sede de Mapfre en El Ensanche
Contrata una tasación del edificio, de 19.263 metros cuadrados y planta baja más ocho, por el que el dueño le pide 44 millones de euros
Desde hace al menos año y medio era público que la sede de Mapfre en Bilbao estaba a la venta. Un imponente edificio de planta ... baja de más de ocho alturas ubicado en pleno corazón de la capital, junto a la plaza de El Ensanche, en la bilbaína calle Ibáñez de Bilbao. También se sabía que se habían interesado varios fondos de inversión, pero ahora el que parece que va a por todas es el Gobierno vasco. El Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales ha contratado una tasación del inmueble con el objeto, según reconoce en el documento de adjudicación, de «sustentar una posible propuesta de adquisición por la Dirección de Patrimonio y Contratación del Gobierno vasco».
El propio Ejecutivo reconoce en el mismo escrito, al que ha tenido acceso EL CORREO, que el valor por el que el propietario realiza su oferta es «elevado»: 44 millones de euros. Por eso califica esta tasación, para la que había elegido a tres expertos, de «especial responsabilidad y trascendencia», y subraya que este precio «no puede ser el factor determinante», sino que el adjudicatario (José Luis Polo Francisco, que cobrará 17.500 euros por su trabajo) debe realizar una evaluación «especialmente bien articulada, fundamentada y argumentada».
El edificio de oficinas de Ibáñez de Bilbao ha adquirido una relevancia extraordinaria tanto por su privilegiado emplazamiento como por la amplia superficie del inmueble. Situado en pleno corazón de El Ensanche, dispone de más 19.263 metros cuadrados, de los que 13.000 están dedicados a oficinas y el resto, bajo rasante, lo ocupan parcelas de parking.
El propio Gobierno vasco reconoce que la situación actual del edificio es «especialmente compleja». No solo porque se carecen de propiedades de características similares en el centro de Bilbao para fijar su precio real de mercado, sino porque no está vacío. De hecho, el 33% de su superficie sigue ocupada por la compañía de seguros, un 53% está arrendado a terceros y solo un 11% se encuentra libre. Además, la Dirección de Justicia Digital e Infraestructuras del departamento, subraya que, en cualquier caso, si sigue adelante la operación de compraventa, «se ha de materializar sobre la hipótesis de que serán necesarios en torno a tres años para su total desalojo y su puesta disposición del comprador».
Usos «sin concretar»
Fuentes del departamento de Justicia han confirmado el interés por hacerse con la titularidad del edificio, aunque de momento no se pueden concretar sus futuros usos. En cualquier caso, son públicos los problemas de espacio que tiene en la actualidad el sector judicial en la capital vizcaína. Hace tan solo unas semanas, según informó este periódico, el propio juez decano de Bilbao, Aner Uriarte reconocía que «el Palacio de Justicia se ha quedado pequeño no, pequeñísimo» para justificar la decisión de que el nuevo Juzgado de lo Mercantil número 3, que empezará a funcionar en la segunda mitad del año, lo hará de forma temporal en Getxo porque en la capital vizcaína «no hay sitio». Una falta de espacio, de la que se vienen quejando los jueces desde hace tiempo, empieza a representar un problema de organización.
Respecto a la operación de venta, Mapfre continúa así con su proceso de desinversión de activos no estratégicos que inició hace años. Hasta ahora, la compañía había aprovechado la recuperación del sector inmobiliario para acelerar la enajenación de los inmuebles menos atractivos de su cartera de inversiones y de paso garantizar el retorno económico de la venta de viviendas, locales y oficinas, principalmente. Esta estrategia se intensificó a lo largo de 2018 y se concentró fundamentalmente en Barcelona, Madrid y Valencia. Un año antes Mapfre había adelgazado su cartera en 130 millones.
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