«Mi generación ha asumido que sufrirá la precariedad»
La Diputación ofrece un programa de prácticas a 25 estudiantes que cobrarán 500 euros al mes por veinte horas semanales
Martín ibarrola
Viernes, 23 de febrero 2018, 01:03
Adriana Martín tiene 25 años y dos títulos universitarios de Comercio Internacional y Gestión de eventos, trabaja en una tienda de ropa y estudia el ... cuarto curso de Sociología. La falta de tiempo y el estrés lo supera únicamente con una ilusión que resulta complicada de ensombrecer. «Con el plan Bolonia cuesta mucho conciliar trabajo y estudios. En fin, mi generación ha asumido ya que sufrirá la precariedad. Lo único que quiero, en cualquier caso, es seguir aprendiendo de lo mío. Pensaba hacer un máster después de esta carrera». La meta de Adriana parece concreta: realizar estudios sociológicos sobre las últimas tendencias en moda para grandes firmas como Inditex. Mientras persigue sus sueños, ha accedido al programa de la Diputación de Bizkaia denominado 1000x1000, con el que 25 jóvenes se acercan doce empresas de diferentes sectores a través de la Agencia de Empleo y Emprendimiento DEMA.
La diputada Teresa Laespada ha explicado que se trata de una iniciativa «innovadora para fomentar la empleabilidad entre jóvenes con cualificación, que se encuentran en búsqueda activa de un trabajo y que pertenecen a la denominada generación millennial». Durante un encuentro entre los alumnos y las empresas, la responsable foral de Empleo, Inclusión Social e Igualdad animó a los participantes a mostrar todo su potencial. «Tenéis motivaciones y competencias sensiblemente diferentes a los que os sacamos un puñado de años».
«Los becarios explotados acaban hablando y Bizkaia es pequeña. Las empresas tienen su responsabilidad»
Las empresas
Los veinticinco estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación del Campus de Leioa de la UPV/EHU trabajarán durante ocho meses en una entidad elegida según sus preferencias. Hasta mayo cobrarán 400 euros mensuales y prepararán una propuesta concreta con la que únicamente serán seleccionados doce candidatos. Los finalistas se incorporarán a la empresa durante los próximos cinco meses y cobrarán 500 euros por un máximo de 20 horas semanales.
Última opción, ertzaina
«Es mi primera experiencia laboral y estoy emocionada», reconocía Leire Zabala, una alumna de 23 años de Ciencias Políticas. «3.000 euros sería un buen sueldo, aunque soy consciente de que el mercado está muy mal. Todos tenemos amigos mileuristas». Leire será compañera de prácticas de Imanol López, un estudiante de Publicidad que conoce muy bien el esfuerzo de trabajar con el salario mínimo en un centro comercial. Ahora no cierra ninguna puerta. «Mi preferencia es la divulgación de la nutrición y el deporte. Si no, buscar alguna agencia publicitaria. Y como última opción, me hago ertzaina».
La representante de Mutualia, Miren Fernández, se mostraba tajante frente a la precariedad. «Las empresas tienen una responsabilidad a la hora de permitir ese tipo de condiciones laborales. Los becarios explotados siempre acaban hablando y Bizkaia es muy pequeña. Cada entidad sabrá cuál es su seña de identidad». Fernández todavía recuerda su etapa de becaria, en la que cobró poco y aprendió mucho. «No vamos a exigirle el mismo rendimiento que a un trabajador de la plantilla. Si se genera un buen ambiente, las prácticas se vuelven un bagaje único». Mutualia, asegura Martínez, no cerrará la puerta a la contratación.
«3.000 euros sería un buen sueldo, aunque sé que el mercado está muy mal»
Los becarios en práticas
Los alumnos preguntaban ayer a las diferentes empresas sobre sus prácticas. Pablo González, gerente de Gorabide, reconocía que los ‘millenial’ han «llegado en un momento difícil, pero están preparados y tienen ganas. La renovación es inevitable». La responsable de comunicación de Bizitegi, Mónica Fandiño, esperaba con ganas la llegada de sus dos estudiantes. «El mundo digital, las redes sociales o incluso opciones como el ‘crowdfunding’ traen una modernización necesaria al sector social. Intentaremos que se sientan cómodos para que puedan trabajar y aprender al máximo».
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