Alex Txikon: «Tenemos que devolver a los hosteleros el cariño que nos dan»
El alpinista llevó al Eneperi, su bar favorito, a Jesús Calleja y a un grupo con el que viajó de expedición a Nepal
Aunque el alpinista Alex Txikon no frecuente demasiado los bares, los entiende como «una parte fundamental de nuestra tierra. Nos caracterizan». Por sus bares los conocerán. El también aizkolari ofrece un nombre propio que tiene mucha relación con su estilo de vida. El vizcaíno se decanta por el Eneperi (Gibelorratzako San Pelaio 80, Bakio). «Yo lo ligo a Bermeo, pero sé que los de Bakio me echarán la bronca. Que no se lo tomen mal...», se disculpa risueño.
«Recuerdo muy buenos momentos vividos con su propietario, Antonio». Cada vez que Txikon va hasta el Eneperi, se dedica a las gildas y a conversar con los amigos. Y a darles un capricho a sus ojos: «Las vistas son mágicas, el medio natural espectacular; además, al ser un caserío refleja la cultura vasca».
Recuerda los días de San Juan preparando la hoguera. «La última vez nos juntamos un grupo que viajó a Nepal, estuvimos también allí con Jesús Calleja». De vez en cuando ayuda a podar árboles de la zona y, aunque advierte de que bebe solo agua -«porque no soy de alcohol»-, se le hace la boca agua al pensar en la barra llena de pintxos. «Confinado te das cuentas de esos pequeños detalles que en realidad son muy grandes». También en casa piensa en todos los sectores que sufren la crisis y vaticina: «Tocará apoyarles cuando esto termine, no solo al Eneperi, sino a muchos otros. Habrá que devolverles el cariño que nos dan siempre».
