Los sindicatos firman con Euskomer el primer acuerdo marco laboral de Euskadi

Los sindicatos vascos y la Confederación Vasca de Comercio (Euskomer) suscribieron ayer el primer acuerdo marco de la comunidad autónoma que regulará las relaciones laborales de un sector compuesto por 18.000 empresas y autónomos y en torno a 75.000 asalariados. Firmaron las centrales ELA, CC OO y LAB, y queda pendiente UGT, según informó la organización empresarial. Este pacto, si tiene continuación en otros sectores, puede abrir la puerta a una nueva etapa en las relaciones laborales, ya que blinda y da prioridad a los convenios provinciales del sector en Euskadi frente a los acuerdos de ámbito superior, especialmente los estatales, que habían ganado nichos de competencia por las últimas reformas laborales.

La generalización de este tipo de acuerdos supondría acabar o reducir la polémica que de forma permanente mantienen las centrales nacionalistas ELA y LAB con CC OO y UGT, cuyas confederaciones suscriben pactos a nivel nacional en diversos sectores que son de aplicación en Euskadi si no son vetados por acuerdos marco como el alcanzado ayer.

En opinión de ELA, el pacto impedirá que patronal y sindicatos estatales «usurpen materias de negociación a los trabajadores» vascos, mientras que para LAB, quien espera que la iniciativa se extienda a otros ámbitos, se trata de un logro «parcial», ya que no ha podido incluir en el mismo medidas que impidan empeorar en los convenios de empresa lo fijado en los sectoriales. Esta es una vieja reivindicación de la central abertzale que choca frontalmente con la prioridad aplicativa que la ley otorga a los pactos de empresa.

De forma paralela, el sindicato ELA, mayoritario en el sector, suscribió el convenio provincial de comercio textil de Bizkaia con la patronal Cecobi, con siete años de vigencia, que cumple el próximo 31 de diciembre, y que recoge «incrementos salariales para todos lo años» y la ampliación al menos a 36 meses de la ultraactividad del mismo, según la central firmante.

Se trata de un pacto polémico, rechazado por CC OO de Euskadi, que critica, entre otras cosas, que las subidas salariales no son homogéneas en las empresas, con trabajadores que no recibirán atrasos y que permite la inaplicación de convenios sin tener que recurrir al procedimiento legal establecido al respecto. «ELA empeora con su firma -denuncia la central de Unai Sordo- algunas de las partes más regresivas de la reforma laboral».