"Que la juventud trabaje es la única solución"

La sostenibilidad del sistema de pensiones supone un verdadero quebradero de cabeza para todo el que se lo plantea. Como medida de alivio, que no solución, se plantea la posibilidad de desvincular las pensiones de viudedad y orfandad de la Seguridad Social y convertirlas en prestaciones asistenciales para que se financien vía impuestos. A pesar de que este es un tema delicado, el debate va más allá: una población envejecida y el empleo de mala calidad que se extendió tras la crisis ponen contra las cuerdas a un Fondo de Reserva de la Seguridad Social ya en mínimos. El futuro próximo se presenta incierto, y el largo plazo exige reflexión y reformas. Antonio González Cabezudo, presidente de la Asociación de Pensionistas, Jubilados y Viudas de Álava Las Cuatro Torres conoce de primera mano a los rostros detrás de esta realidad, y confía en que los jóvenes trabajen para que el sistema sea sostenible.

- ¿Con una subida del 0,25% de las pensiones se garantiza un nivel de vida digno?

- Para aumentar un 0,25% mejor que no subieran nada. Que se fije el mismo porcentaje a todos es algo que no entiendo; hay gente que está cobrando 500¤ de pensión y yo veo cómo viven, las viudas sobre todo, eso es una verdadera vergüenza. No me parece lógico que se le incremente lo mismo al que ingresa 2.000 o 1.700 euros que al que recibe 500 o 600. A esos que ganan más, que los hay, habría que congelarles la pensión para poder subir más al resto.

- Cada vez hay más pensionistas y menos cotizantes. ¿Es insostenible el sistema de pensiones público?

- El futuro será malo si no se hacen cambios, el sistema tendrá que ser diferente. No puede ser tan difícil, no vamos a estar siempre tan mal como estamos en la actualidad. Lo que pasa es que los gobiernos no han pensado en el futuro, ninguno; sin el Fondo de Reserva no se habrían cobrado las pagas este año. Ahora ven que cada vez hay más pensionistas y menos trabajo. Ellos son los que nos tienen que ofrecer una solución. Puedes tener una pensión particular, pero si has cotizado lo lógico es que cobres de la Seguridad Social.

- ¿Cuál es la salida?

- El sistema puede ser sostenible si los jóvenes tienen un empleo digno, no uno en el que te llaman para tres o cuatro días, eso no es trabajo. Que la juventud trabaje es la única solución. Además se han hecho muchas cosas mal.

- ¿Qué cosas?

- Ha habido gente a la que no le correspondía una pensión y se le ha dado; ponían la herencia a nombre de los hijos para poder recibir una ayuda. O quienes se han metido parte del salario al bolsillo. Hay una diferencia entre el pensionista que ha cotizado por todo lo que ha hecho y el que recibía el sobre. Existen también muchas cosas en las que se está gastando sin tener necesidad, y todos los chorizos a los que se les descubre... Lo que tenían que hacer no es meterlos a la cárcel: se han llevado el dinero, pues que lo devuelvan.

- ¿La solución pasa por que las pensiones se financien vía impuestos?

- Las no contributivas sí, deberían estar contempladas en los Presupuestos Generales del Estado porque hay muchas y perjudican a la Seguridad Social; es gente que está recibiendo una prestación sin haber cotizado nunca. Los partidos tendrían que sentar unas bases y adquirir un compromiso para que los subsidios se garanticen y no queden a merced de cada gobierno. Tendrán que subir impuestos, si no, no sé de dónde van a sacar el dinero. Me da igual que se llame Seguridad Social o ayuda social, lo importante es que la persona que tiene derecho a una ayuda la reciba.

- Se habla de que las pensiones de viudedad y orfandad podrían correr la misma suerte.

- Me parece muy injusto. Se habla de que se va a dar una especie de paga social que no se sabe cómo se va a dar, a quién, ni en qué condiciones. Por otra parte, tampoco es justo que una viuda reciba el 50% del sueldo de su marido, lo normal sería que cobrara el 70%.

- ¿Cómo se viven estos momentos de incertidumbre?

- Los pensionistas tienen mucho miedo, cada político dice una cosa, y eso confunde. Se preguntan qué va a pasar. Nosotros lo notamos en que hacemos muchas excursiones y hay personas que no van porque tienen miedo y prefieren guardar el dinero. Por ejemplo, viajes a la playa que cuestan ocho euros, pero me dicen si vamos el matrimonio son dieciséis euros, por ese dinero comemos toda la familia. Desde hace tres años la gente está muy preocupada. Antes llevábamos ocho y nueve autobuses llenos, hasta doce incluso, pero ahora con cuatro estamos contentos.

- ¿Estaría de acuerdo con que se fijase una prueba de medios para fijar la cuantía de las pensiones? Es decir, que se cobrase en función de las necesidades de cada persona y no de lo cotizado.

- Hay personas que tienen una pensión muy alta y cuatro pisos, son una minoría. Pero, en general, ese dinero se lo han quitado de otras cosas, han ahorrado y se lo han ganado. Si han cotizado a la Seguridad Social la pensión es un derecho que han conseguido. Además ya pagan impuestos por lo que tienen.