«La gente muestra interés por lo artesanal y auténtico»
15 artistas ponen en valor sus productos realizados a mano con madera, joyería o piel en el pórtico Santa María de Durango
Ofrecer una nueva vida al producto y poner en valor la artesanía. La asociación Eixu Artisau exhibe productos únicos en el pórtico Santa María de Durango, con la presencia de quince expositores que trabajan la madera, la joyería o la piel.
«Llevo tiempo trabajando la piel y hace unos meses, me puse a vender los productos y comencé a asistir a las ferias. Todas ellas son piezas y combinaciones con los colores, que me dan mucha energía e intento crear una composición como si fuera un cuadro», explica Marisa Irusta, de Deba, con la marca Mugarza.
«Tenemos que dar visibilidad a los productos y a través de Instagram, lo damos a conocer. Hay oportunidades y potenciar lo artesano y elaborado a mano. Empezamos otra vez a impulsar la creatividad y los productos hechos a mano», prosigue.
Vecinos de Durango y resto de la comarca compraban los últimos detalles para los regalos navideños. «Qué bonito es todo, encima cuidan muchos elementos como la madera. Voy a comprarlo porque me encanta», subrayaban una madre e hija.
La marca 'Salty Wood' tenía piezas muy bonitas, una renovada marca realizada por Aketza Sánchez y Oihana. «El tronco lo he encontrado en la deriva. Es tratado, pulido y barnizado y no cogemos cualquier madera, tiene que tener su proporción. Son cuadros para colgar y se unen las maderas, pegar a presión y con cola», explicaba Wanda Griffero. Una de las clientes compró un detalle para poner las llaves.
«Se lija y se barniza. Le echamos resina, queda muy brillante. Es compartir el arte con la gente. Se aprecia lo que haces, ayer hubo un vecino que se emocionó al ver a gente joven creando estos productos. Su abuelo era carpintero y le motivaba ver la pasión con la madera que teníamos», explicaban desde la marca.
Un accidente grave realizando surf le llevó al vecino de Oiartzun, Aitor San Román, a reinventarse y crear la marca 'Kosta, itsas egurrak'. «Tuve que aprender a andar otra vez. Era invierno y un día que fui a la playa había un montón de madera y tropecé un par de veces. Comencé a recoger y hacer figuras como lámparas, perchas… perfeccionando la técnica y a recuperar maderas y darles una nueva vida», añade.
«Las maderas las recojo yo, las dejo secar unos meses. Hago llaveros, pendientes, anillos, lámparas, colgadores… Da gusto que la gente muestre interés y apueste por lo artesanal y lo auténtico. Son productos hechos a mano, son únicos y te llevas parte del corazoncito de una persona que ha estado pensando y trabajando para que te puedas llevar algo especial. Llevo cuatro años y lo más duro es el día a día», añadía.
La presidenta del colectivo, Aurkene Pagaldai, lleva desde hace doce años realizando joyas hechas a mano. «Realizo lingotes de plata, los lamino, el diseño.. ahora estoy trabajando la página web para tenerlo como punto de venta. Siempre intentamos que haya variedad en el producto y sea atractivo para el cliente. Nuestros productos son personales y es algo que lo has hecho con mucho mimo y artesano», confesaba.
«Es el pilar de la cultura e identidad, de la tradición y de la innovación. Hay que poner en valor el trabajo de los artesanos y creadores para fortalecer el sector y conseguir nuestra profesionalidad. Es imprescindible el apoyo institucional para dar facilidades, asegurar la sostenibilidad del sector y animar a las nuevas generaciones a sumergirse en el mundo de la artesanía. La artesanía no es solo el oficio que nos recuerda el pasado, sino también el que se convertiría en la base de un futuro prometedor», explicaba
El producto tradicional vasco llegaba de la mano de Maria Fe Bueso, procedente de Portugalete con su marca 'Itsasloo portu'. «Es ropa de arrantzale y complementos con temática vasca, pañuelos de fiestas, camisetas con la aplicación de lauburu, faldas de arrantzale, pantalones, complementos …Hay que poner en valor la artesanía. Lo que más piden son los pañuelos personalizados», manifiesta.
Accesorios para mascotas
Decenas de vecinos se detenían ante los atractivos accesorios para mascotas de la tienda Lioka de Ane Solana. «Con cuerdas de escalada y paracaidista, realizamos collares y correas para perros. Están hechos a medida, pueden elegir los colores y tamaño, enfocamos en los paseos para las personas que llevan gafas y móviles. Cada cuerda fina aguanta 200 kilos», subraya la duranguesa.
Enfocado a las mascotas y a los paseos, tras terminar los estudios, se reunió con unas amigas a tomar un café. En el confinamiento, hicieron unas cestas para furgonetas y les gustó la idea de hacer nudos. «Me comentó una amiga: 'Pero por qué no haces esas correas para mi perro o algo así? Vi que por la zona de Alemania y Europa del centro se llevaba un montón y aquí no había. Fuimos pioneras en hacer algo así. Es algo diferente y nuevo. Los clientes repiten», subraya.
La joyería es otro de los artículos más demandados. El orfebre realiza de forma artesanal y trabaja con minerales, piedras y plata. «Reciclo mucho lo que son los cubiertos antiguos y apuesto por el 'upcycling', dando una nueva vida al producto en forma de brazalete, collares, colgantes, anillos…», explica este vecino, que creó su marca hace 15 años.