Fallece la periodista Izaskun Ellakuriaga a los 53 años
Natural de Iurreta, desarrolló una amplia trayectoria vinculada al euskera, con un papel destacado en la Durangoko Azoka y otras iniciativas culturales
Izaskun Ellakuriaga, conocida por su compromiso con la divulgación del euskera y su labor en la información cultural del Duranguesado, falleció este miércoles a causa de un cáncer agresivo a los 53 años y tan solo un mes después de recibir la noticia. Natural de Iurreta, desarrolló una carrera sólida en prensa escrita y en el ámbito de la cultura vasca.
Su carrera profesional comenzó en Euskaldunon Egunkaria, diario en el que cubrió temas culturales y sociales. Posteriormente se incorporó a la revista Eraz, que más tarde daría paso a Anboto, donde ejerció como redactora y directora entre 1994 y 2003. Conocida por su compromiso con la difusión del euskera, durante años puso voz e imagen a proyectos que marcaron la vida social y cultural del Duranguesado.
Trabajó como responsable de prensa en diversas instituciones, como el Ayuntamiento de Berriz, y participó en la organización de eventos tan significativos como el Ibilaldia de 2005 o el Campeonato de Bertsolaris de Euskal Herria en 2009. Durante la última etapa de su trayectoria, estuvo estrechamente vinculada a Gerediaga Elkartea, desde donde lideró la estrategia de difusión de la Durangoko Azoka.
Además de su labor en medios escritos, fue una voz habitual en Bizkaia Irratia, donde colaboró en programas de divulgación cultural. Junto a la periodista Marijo Deogracias fundó Lekukom, una agencia especializada en gestión de eventos, redes sociales y asesoría en comunicación institucional. Completó su formación en áreas como relaciones públicas, protocolo, organización de actos y dirección de negocios multimedia. En 2012, vivió una etapa en Nueva Zelanda y Australia que enriqueció aún más su visión internacional del sector.
Su fallecimiento ha causado una profunda conmoción en el entorno cultural del Duranguesado. Compañeros de profesión, entidades locales y numerosas personas que compartieron con ella proyectos y vivencias han expresado su tristeza y han destacado su profesionalidad, cercanía y capacidad para tejer redes humanas a través de la palabra.
