Durango homenajea la figura de Jon Irazabal, alma máter de la Azoka
La localidad reivindicó su apuesta por la cultura y el euskera del exdirector durante tres décadas de la feria
'Hartzea ematea da' – 'Dar es recibir'. Es el lema de la Durangoko Azoka y no hay frase que defina mejor la figura de Jon Irazabal, exdirector de este evento cultural durante más de tres décadas y fallecido el pasado verano, al que ayer se le brindó un merecido homenaje póstumo. El espacio de San Agustin Kultur Gunea de la villa se llenó de amigos y personalidades del mundo de la cultura y la política para este acto, que dio paso al inicio de este evento, que se prolongará hasta el domingo. Todo ello, amenizado por los bertsolaris Aner Peritz y Miren Amuriza, que dialogaron sobre el euskera, la cultura y los entresijos de la Azoka.
El lehendakari Imanol Pradales destacó el compromiso y la aportación de Jon Irazabal por hacer de la Azoka el epicentro de la cultura vasca. «Fue una figura clave en la evolución de esta feria, siempre le recordaremos en un lugar que me trae muchos recuerdos de mi niñez y juventud. A las puertas de la Navidad, disfrutaba de Durango y siempre llevaba algún libro, cómic o disco de música. Seguimos manteniendo la tradición de recalar en la villa por estas fechas», explicó.
La presidenta de la asociación cultural Gerediaga, Nerea Mujika, subrayó la importancia de desarrollar una cultura saludable. «Leer, oír, estudiar y dar a través del euskera y qué mejor que recordar a Jon Irazabal, cuánto sudor por el pueblo y la cultura. Te echaremos mucho de menos», subrayó. Uno de los momentos más emotivos llegó de la mano de un vídeo recopilatorio en torno a la figura de Irazabal y la presencia de sus hermanos Itziar e Iñaki.
«Era constante, generoso y vio cómo creció la Azoka desde aquellos inicios, siempre apostando por los creadores, editoriales, músicos y escritores», recordó su hermana. La canción 'Izarren hautsa' de Mikel Laboa puso punto final al acto, junto con los bertsos de Peritz y Amuriza, reivindicando el impulso por euskera.
Era administrativo de carrera, pero Irazabal dedicó su vida a la memoria histórica del Duranguesado. Escribió varios libros sobre el bombardeo de Durango de 1937 o sobre las fiestas de Iurreta. También elaboró un estudio sobre las antiguas banderas de la comarca, era un estudioso de las costumbres que trataba también de promover, asimismo, la mejora económica de toda la zona.
La alcaldesa, Mireia Elkoroiribe (PNV), por su parte, destacó que Durango se convertirá en «el epicentro de la creatividad y tranmisión de la cultura vasca» hasta este domingo.