El bar de Iurreta que se ha convertido en un referente musical

La idea de convertir el local en un espacio musical no fue planeada desde el principio. Su amigo Ángel Etxebarria, miembro del grupo Akustikovers, le sugirió la idea de dar un concierto. «Decidí apostar por ello y, al ver que a los clientes les gustaba, seguí adelante», recuerda Rodriguez. Empezó ofreciendo una actuación al mes, después una semanal y a día de hoy cada viernes y sábado.

A pesar de su esfuerzo por apoyar a los músicos locales, Rodríguez lamenta que no recibe muchas solicitudes de artistas de la zona. «Me contactan diariamente de 5 a 10 cantantes o grupos musicales, pero nunca nadie de la zona», explica. Sin embargo, ha tenido la oportunidad de recibir a talentos de toda Euskadi, España e incluso de Iparralde.

El proceso de selección es riguroso. María pide a los artistas que le envíen vídeos de sus actuaciones para evaluar si encajan con el estilo del establecimiento. «Intento dar cabida a gente nueva. Tengo una lista de espera muy, muy larga», comenta. A pesar de la alta demanda, se esfuerza por mantener la calidad y la diversidad en su programación musical.

El Korta Taberna ha acogido a intérpretes de diversos géneros, aunque esta emprendedora tiene sus preferencias. «Aquí se puede escuchar blues, rhythm and blues, rock en casi todos sus géneros o subgéneros», dice. Rodríguez es muy clara en cuanto al estilo de música que quiere en su local. Evita el reggaetón, el pop y los cantautores, ya que estos últimos no atraen a la clientela que busca un ambiente más animado. «Desde el principio dije que en mi bar no se pone reggaetón, y por mucho que me lo pidan, no lo voy a poner en la vida», afirma con determinación.

Gestionar el negocio y la programación musical no es tarea fácil. La hostelera admite que no siempre tiene tiempo para responder a todas las solicitudes y que prefiere el contacto cara a cara. «Para mí es mucho más cómodo llegar a un acuerdo en persona», confiesa.

A pesar de los desafíos, Rodríguez ha logrado que su establecimiento se convierta en un referente musical en la zona. «Cada vez viene más gente, porque el sitio se va reconociendo», dice con orgullo. Su local ha atraído a personas de Durango y otras poblaciones cercanas, convirtiéndose en un punto de encuentro para los amantes de la música en vivo.

Por otro lado, el bar no deja de sorprender a sus visitantes, ya que ocasionalmente organiza un quiz de preguntas en inglés, fomentando la participación grupal. Esta iniciativa busca atraer a un público diverso, ofreciendo una experiencia entretenida y dinámica que complementa su oferta cultural y artística.