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MANUELA DÍAZ
Martes, 12 de julio 2016, 23:52
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Los conciertos, las bulliciosas comidas populares, el sonido en bucle de las barracas o el trajín nocturno de las txosnas. Las fiestas no llueven siempre a gusto de todos. Lo que para unos es sinónimo de diversión para otros no es sino una auténtica pesadilla. ...
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