Reducen de 72 a 45 días la veda a la pesca de túnidos en el Atlántico con dispositivos de concentración de peces

La flota atunera vasca ha recibido con satisfacción la decisión adoptada en la reunión extraordinaria de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT), celebrada en Chipre, de reducir de 72 a 45 días la veda a la pesca con dispositivos concentradores de peces (FAD, por sus siglas en inglés) el año que viene. Esta medida, que trata de buscar un equilibrio entre criterios científicos y de sostenibilidad socioeconómica, ha sido considerada por la organización Europêche, que representa al sector, como «un alivio» de cara a mitigar el impacto de una prohibición que considera «excesivamente conservadora».

Las restricciones asociadas a la pesca de atún mediante el también conocido como 'sistema de objetos' ha generado «graves consecuencias», aseguran desde las firmas atuneras del País vasco, en su mayoría con sede en Bermeo y agrupadas en las organizaciones de OPAGAC y ANABAC.

La decisión de reducir el período de veda se alinea con las conclusiones del comité científico de ICCAT, que no considera necesaria esta restricción para garantizar la salud del stock de atún patudo, sujeto a un plan de recuperación a 15 años vista.

Según Europêche, el comité ha señalado que los actuales Límites Máximos de Captura (TAC) y su distribución son «suficientes» para preservar las poblaciones de esta especie de túnido, mientras que las evaluaciones más recientes también indican que el stock de rabil «no está en situación de sobreexplotación».

El impacto de esta reducción de la veda, por otra parte, no solo beneficia a las flota vasca y europea que faena en el Atlántico, sino también a sectores como las conserveras africanas «que se han visto obligadas a cerrar por las restricciones a la pesca con FAD, sobre todo en países como Costa de Marfil y Cabo Verde», lamentan desde el sector atunero vasco.

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