El traslado de la fábrica de hielo iniciará la transformación del puerto de Bermeo

La demolición de la factoría de hielo dejará libre el espigón en el que se emplaza en la actualidad, junto al arranque del rompeolas y el muelle del Martillo. En esa zona portuaria, de hecho, está previsto que se asienten en el futuro «el club de remo, el servicio de Capitanía y la base de la Cruz Roja», recuerda el primer edil bermeotarra.

La aprobación inicial de la tercera modificación del Plan Especial de Ordenación del Puerto de Bermeo establece como objetivo, por otro lado, «mejorar la interacción puerto-ciudad», señalan desde la dirección de Puertos y Asuntos Marítimos del Gobierno vasco. Para ello, se contempla alejar del centro urbano la planta de Astilleros de Bermeo, ubicada en el muelle Artza, a escasos metros de varias edificaciones de viviendas.

El expediente del plan subraya, en ese sentido, la necesidad de «suprimir» del área portuaria actividades como la que desarrolla la carpintería de ribera, criticada en numerosas ocasiones por la plataforma «Astillero Toxikorik Ez», que rechaza la construcción de embarcaciones de poliéster reforzado con fibra de carbono por parte de esta compañía en su actual emplazamiento.

Una vez trasladado el astillero a su nueva edificación, que se localizará en Erroxape, el muelle de los carros varaderos se reservará para el desarrollo de otras actividades, «como talleres en los que se permitirán hacer pequeñas reparaciones de barcos y otros usos que no resulten molestos para el entorno urbano», explican fuentes del Ejecutivo autónomo.

El nuevo planteamiento del puerto de Bermeo, que define los usos comerciales, pesqueros y náutico-recreativos de los diferentes muelles de la dársena vizcaína, supondrá también la transformación de la explanada de Frantxua, que en la actualidad está ocupada por medio centenar de lonjas de pesqueros locales. En un futuro, los almacenes dejarán espacio en esa área «a nuevas actividades e ideas de investigación y emprendimiento ligadas a la náutica, el ocio y la identidad de Bermeo», subraya, por su parte, el primer mandatario de la villa marinera.