Amarristas piden cambiar los criterios de adjudicación para evitar más denuncias

Las asociaciones de usuarios de embarcaciones de recreo de doce puertos vascos reunidos en Cauerpe -entre los que se encuentran Lekeitio (Leakai), Elantxobe (Ermitxo), Sukarrieta (Portuondo), Mundaka (Gorataldi) y Bermeo (Portu Zaharra)- han solicitado al Gobierno vasco que modifique el principal criterio que emplea a la hora de adjudicar las plazas de amarre para evitar más quejas y denuncias y reducir así «la gran litigiosidad que se ha generado en los últimos años.

Durante su comparecencia ante la comisión de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca del Parlamento vasco, representantes de la agrupación, que engloba en torno al 80% de usuarios de los muelles vascos –lo que representa unos 2.800 barcos– , explicaron que el actual desencuentro con la gestión del entre público Euskadiko Kirol Portuak (EKP) se remonta a 2017.

Durante ese año, dejaron de la lado el principio de la antigüedad a la hora de asignar los amarres «por otros más económicos», aseguran. «Así, actualmente se da preferencia a quien mejor aproveche la lámina de agua, lo que se traduce en que, por ejemplo, puede quedar por delante un barco de 8 metros de eslora frente a otro cuatro centímetros más pequeño, o sea que paga más, aunque el segundo sea de un arrantzale de toda la vida empadronado en el municipio que lleva desde su jubilación como titular de esta plaza».

Esta situación acarrea a su juicio, el riesgo de «desnaturalizar los muelles deportivos dejando al margen a usuarios de toda la vida que corren el riesgo de quedarse sin amarre como ha sucedido en Lekeitio tras la reordenación de los pantalanes».

La asociación, que ha vuelto a reactivarse hace menos de un año para hacer un frente común, insistió en la necesidad de cambiar la situación «porque de no ser así, el número de pleitos se va a extender por todos y cada uno de los puertos vascos».

También han trasladado su malestar por la gestión de las listas de espera de EKP. «No funciona porque hay amarres vacíos que no se adjudican y por eso sería conveniente que fuesen públicos y todos los usuarios pudiéramos conocer de primera mano como están».

En esa misma línea, denuncian la picaresca que se produce en el traspaso de barcos. «Cuando se vende la embarcación se debería dejar el amarre, pero en el día a día hay quien no lo realiza así, no son la mayoría, en torno a un 30%, pero afecta al que está en lista de espera», señalaron.

Desde Cauerpe han reclamado asimismo estar presentes en todos los órganos consultivos de los puertos que el Gobierno vasco constituye desde finales del año pasado y que esta semana acaba de activar en Lekeitio.

«Esperamos estar en todos porque hoy en día, la náutica deportiva es un agente social y económicamente muy importante en nuestros puertos, y somos buenos conocedores de la situación y problemas que existen en cada uno de ellos», recalcaron.

En este orden de cosas, los promotres de la iniciativa valoran «muy positivamente la acogida y el interés que por el momento han mostrado desde el departamento de Pesca y Alimentación del Gobierno vasco a nuestras peticiones».

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