Los conductores que no pagan el tramo ampliado de la Supersur caen del 21% al 5%

El impago del peaje era más una cuestión de desconocimiento que de picaresca. El segmento que lleva a la AP-68, en dirección a Vitoria, cuenta con un pórtico automatizado (llamado 'free-flow', parecido a las autopistas portuguesas) que se encarga de tomar la matrícula de cada vehículo y girar el recibo al instante a su propietario. Sin detenerse. Pero para ello, el conductor necesita tener el dispositivo VIA-T en su parabrisas o haberse dado de alta en la web de Interbiak, añadiendo una tarjeta de crédito. De lo contrario, el usuario pasa de largo (en la mayoría de los casos sin percatarse) y deja pendiente la deuda.

¿Qué ha cambiado de la primavera pasada a este verano para que la inmensa mayoría de los coches y camiones paguen? Según la Diputación se han dado varias circunstancias que han permitido minimizar esta morosidad. En primer lugar, los conductores conocen ahora más y mejor el sistema de cobro 'free-flow', cuyo primer pórtico en Bizkaia ha sido precisamente el instalado en la Supersur. Curiosamente, este sistema solo funciona en dirección a Vitoria-Burgos-Logroño; no en sentido contrario, donde sí hay estaciones de cobro en las que hay que parar el vehículo.

A finales de mayo, el departamento de Infraestructuras y Desarrollo Territorial comenzó a enviar cartas a aquellas personas que pasaban sin satisfacer el importe del canon. Se enviaron 809 avisos mediante correo certificado. En principio, la misiva tenía un carácter informativo. No se reclamaba cantidad alguna y se pedía por favor que se hiciera uso del VIA-T o que el usuario se diera de alta en el sistema de Interbiak. No obstante, en un párrafo final, se advertíade que el uso de la autopista sin el correspondiente pago podía acarrear sanciones de hasta 4.000 euros.

Además de una mayor información, también ha pesado que en algunas de las estaciones de cobro de la AP-68 se ha comenzado también a girar la factura al conductor si ha pasado por el pórtico sin hacer frente a sus obligaciones. La implementación de los sistemas informáticos de la empresa adjudicataria de la autopista vasco-aragonesa y los de la Diputación comenzó por las salidas más cercanas (Arrigoriaga, Llodio...) y ha ido extendiéndose poco a poco hacia el sur.

Según los datos de la Diputación, en los meses de julio y agosto, el número de conductores que ha pasado por el tramo de la ampliación de la Supersur, en sentido Vitoria, ha sido de 295.600. De ellos, 13.800 no abonaron el peaje. A estas personas, una vez identificadas, se les enviará una notificación con la deuda adquirida para que sea satisfecha. En caso de que no haya pago voluntario, se llevará a cabo por vía ejecutiva.

A falta de datos oficiales sobre su nivel de utilización (la institución foral no aporta por ahora cifras de una infraestructura que se inauguró el pasado 5 de abril), el número de 295.600 clientes en dos meses da una idea aproximada sobre el grado de uso de la Supersur (al menos en su tramo ampliado, en dirección a Vitoria). Son casi 5.000 vehículos diarios durante los meses de julio y agosto.

A estas pistas hay que añadir otro dato. Según la institución foral, el volumen acumulado de vehículos que utilizaron el conjunto de la Supersur en los meses de junio, julio y agosto, fue un 20,2% superior al mismo periodo del año pasado. Es decir, la entrada en servicio de la ampliación, que costó cuatro años de trabajos y una inversión total de 220 millones de euros, habría revitalizado el tráfico en la autopista, que enlaza desde hace medio año el área de Ugaldebieta con el pinchazo de la AP-68 en Venta Alta.