Las comparsas aseguran que celebrarán solo actos permitidos por la autoridad

Tras las palabras de reprobación del jueves por el alcalde, Juan Mari Aburto, este colectivo aseguró «que en ningún caso han planteado (las actividades) como una alternativa festiva» a los tradicionales festejos. Con todo, Bilboko Konpartsak se mostró extremadamente crítica con el Consistorio, y con el alcalde en particular, al que acusaron de «anteponer criterios de oportunidad a criterios sanitarios y técnicos» y «abusar de su autoridad».

Uxue Elgorriaga e Iñigo Iglesias, portavoces en esta ocasión de las agrupaciones festivas, presentaron un programa formado por «31 citas culturales», entre ellas un maratón de radio, talleres infantiles, recitales poéticos y ajedrez. El número resultó llamativo, pues la víspera el alcalde había asegurado que solo se habían autorizado cinco. Según los portavoces de las comparsas, «en realidad no son cinco actividades, sino cinco bloques de actividades», correspondientes a otras tantas zonas: Plaza del Gas, Arriaga, Tinglados, etc.

Iglesias defendió que «todos los actos que se van a celebrar cuentan con la correspondiente autorización administrativa». En algunos casos «del Ayuntamiento, pero también hay otros que no necesitan su autorización, aunque sí la gubernativa para concentraciones etc., que también se pide». Los portavoces añadieron que los actos serán seguros y están pensados «para evitar aglomeraciones».

Hace unos días Bilboko Konpartsak anunció que había sido víctima de un robo «de varios recursos necesarios para llevar a cabo las jornadas culturales Bilboko Irria». Este viernes aclararon que dicho robo fue 'metafórico', un recurso para referirse a la eliminación, por parte del Consistorio, de las convocatorias de su programa original. «A las comparsas lo que se nos ha robado no ha sido nada material, sino la confianza y la colaboración mutua», dijeron.

Elgorriaga e Iglesias detallaron que las conversaciones con los responsables técnicos del Ayuntamiento comenzaron en abril. Desde entonces, según su versión, «los responsables municipales han ido borrando los actos que contaban con el visto bueno de los técnicos», de forma «que lo que valía un día, ya no vale al día siguiente». Todos las citas previstas eran «de muy pequeño formato y seguras, por eso estaban en el programa» y se habían eliminado «previamente» los actos que, a juicio de los técnicos municipales, «podían tener la más mínima posibilidad de ser cuestionables».

Los portavoces centraron sus críticas en Aburto, a pesar de que, como el propio alcalde había precisado, se reunió con todos los grupos políticos y todos respaldaron las decisiones sobre lo que se podía hacer y no antes de comunicarlas a las comparsas. Sin embargo, este colectivo censuró al regidor por «exagerar» cuando dijo que las comparsas habían pretendido poner barras en el Arenal. «La realidad es que el 3 de agosto no se descartaron barras, sino terrazas, mucho más humildes y seguras».