Coches camuflados de la Ertzaintza de más de 15 años, en la zona de bajas emisiones de Bilbao

Estos vehículos son el medio de transporte habitual de los agentes que visten de paisano, de los equipos de investigación o los 'askatus' (patrulleros sin uniforme), que los utilizan para desplazarse por la capital vizcaína para cubrir incidencias o hacer vigilancias y pasar desapercibidos. Al trabajar por turnos, estos turismos están permanentemente en funcionamiento, por lo que acumulan muchos kilómetros, algunos superan los 340.000.

Se trata, por tanto, de coches altamente contaminantes y que forman parte del parque de vehículos de la Administración autonómica. La normativa aplicada por el Ayuntamiento de Bilbao e impuesta a las ciudades de más de 50.000 habitantes, aunque cada una la adapta a sus necesidades, prohíbe la entrada en la zona centro a los coches de gasolina anteriores a 2006, y a partir de junio, a los diésel anteriores a 2016, lo que significa un 20% de los 50.000 vehículos que acceden a diario a Bilbao.

Sustitución progresiva

La villa no ha fijado exenciones para rentas bajas, como sí han hecho los consistorios de Vitoria y San Sebastián, pero sí deja fuera de las restricciones a los vehículos que estén prestando servicios de emergencias y esenciales, entre ellos los que se utilizan para el mantenimiento de las funciones sociales básicas, como la seguridad». Según el artículo 14 del reglamento que regula el acceso a la ZBE, entre ellos se incluye «el parque móvil de las fuerzas y cuerpos de seguridad, Policía Municipal, Bomberos y ambulancias», además de la grúa municipal o los que conduzcan profesionales de la salud para el desempeño de su actividad.

Fuentes internas señalan que la mayoría de los coches camuflados de la guardia urbana bilbaína han sido ya sustituidos por híbridos, más modernos y sensibles con el medio ambiente, por lo que quedarían fuera de las prohibiciones. La Policía local también adquirió dos motocicletas eléctricas que, aunque se quedan sin batería, siguen siendo utilizadas por los agentes de Tráfico.