Catas a 80 metros en el viejo basurero de Bilbao
La empresa Berriz Recycling, creada en 2021, demolerá la montaña de antiguos desperdicios para sellarlos
La empresa Berriz Recycling se creó en julio de 2021 con un fondo de un millón de euros para ampliar el viejo vertedero de Bilbao, ... entre Enekuri y Artxanda. El Gobierno vasco anunció ayer que entrará en el capital social de la firma, que lleva ya 18 meses realizando catas de hasta 80 metros de profundidad para investigar la distribución de la contaminación en esta parcela con el fin de restaurarla y, después, realizar rellenos adicionales «que financien la operación». Desde el principio, la tarea se antojaba millonaria.
Se trata de uno de los 'cementerios de basura' más importantes de Euskadi. Allí se depositaron residuos urbanos hasta 1976, aunque durante dos décadas más fue una escombrera incontrolada. Se acumularon en talud 280.000 metros cúbicos de escombros, tierras, lindane, desperdicios domésticos, industriales, voluminosos y plásticos, además de hospitalarios. Todos quedaron cubiertos de vegetación, sin ningún tipo de protección, durante años. La montaña de desechos se vino abajo en las inundaciones de 1983 y alcanzó el corredor del Txorierri. Las tierras y ríos cercanos están contaminados por la cercanía de este foco de polución.
La firma ya retiró en enero 16 toneladas de lindane hallado en la superficie, aunque se ha descubierto más
La empresa, que ha realizado catas a 80 metros de profundidad para conocer la tipología de los residuos y el grado de estabilidad del terreno, ya retiró 16 toneladas de lindane de las tierras más superficiales en enero, pero ahora se han descubierto más restos de esta sustancia, que serán eliminados. Los ecologistas llevan años denunciando la presencia de este tóxico en la zona, que acaba filtrándose y contaminando las aguas. Los operarios de la firma también están recogiendo muestras en los terrenos adyacentes para conocer la extensión real del suelo afectado por el antiguo basurero y el tipo de gases que está generando.
Por ahora, han constatado que toda la basura está distribuida sin orden ni concierto, así que su compactación es deficiente. Como hay una gran pendiente, existe «una alta probabilidad de que haya nuevos desprendimientos a lo largo de toda la ladera del monte», explicaron desde la empresa. Por eso, la restauración requerirá «vaciar» esa montaña de basura antigua y depositar los residuos en otra zona de la parcela, donde serán clasificados.
Depuradora
El siguiente paso será crear un vaso para almacenarlos en condiciones de seguridad. Se impermeabilizará el terreno y las aguas de lluvia serán canalizadas a una estación depuradora. Después, se construirá un centro de gestión, tratamiento y almacenamiento de residuos de construcción donde se dirigirán los materiales de las obras que se ejecuten en Bizkaia. La parte que no pueda ser reutilizada servirá para rellenar la vaguada. La capacidad será de 1,2 millones de toneladas hasta 2030, cuando finalizará la vida útil del vertedero, según las previsiones del Gobierno vasco. Finalmente, se sellará toda la superficie, que se recubrirá con vegetación.
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