Bilbao estrena hoy sus 84 terrazas estivales

Los hosteleros interesados en contar con espacio extra fuera de sus locales tuvieron la oportunidad de hacer su solicitud entre el 19 de mayo y el 6 de junio. En ese tiempo el Ayuntamiento recibió 106 peticiones en total, de las que 14 fueron denegadas: 13 pretendían funcionar durante todo el mes, y una en fiestas.

La mayor parte de las autorizaciones concedidas, casi tres de cada cuatro, se concentran en el distrito de Abando, el que cuenta con más hostelería (de forma habitual cuenta con 471 terrazas), con más turistas y con más vida durante todo el año. En concreto, aquí estarán 62 de las 84 que funcionarán durante todo el mes, y 6 de las 8 permitidas para la semana de fiestas.

Entre los vestigios de la pandemia, cuando las terrazas ganaron protagonismo por motivos evidentes, y el cambio climático, que deja menos lluvias y más opciones de disfrutar al aire libre, este tipo de instalaciones ha ganado importancia en la facturación del sector hostelero. De hecho, en algunos casos es vital para el negocio. El auge turístico también aumenta la demanda.

Dos caras

La otra cara es la que representan los residentes en las calles donde hay más proliferación de mesas y sillas en la vía pública. Distintos colectivos vecinales llevan años quejándose tanto del ruido que generan las terrazas, sobre todo en horario nocturno, como las dificultades que en ocasiones generan para el tránsito por las aceras. El Ayuntamiento está pendiente desde hace años de redactar una ordenanza en la que afronte el difícil reto de buscar un equilibrio entre ambas posturas siempre enfrentadas.