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Jueves, 15 de febrero 2018, 01:11
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Un joven de 18 años tuvo que ser intervenido quirúrgicamente de fractura múltiple en un dedo de una mano y le pusieron también grapas en la cabeza debido a los golpes sufridos al resistirse a un robo con violencia la noche del pasado martes en el barrio de Deusto. La Policía Municipal de Bilbao arrestó poco después a los presuntos autores del asalto. Se trata de dos jóvenes, ambos también de 18 años y con múltiples antecedentes.
El suceso se produjo sobre las 20.00 horas en la calle Pintor Etxenagusia, junto a la Facultad de Económicas de Sarriko. El chico se encontraba en ese momento con varios amigos de su edad. Según su testimonio, cuando caminaban por la acera fueron abordados por dos individuos que vestían prendas oscuras y cubrían parcialmente sus rostros con sendos buff.
«¡Dadnos todo lo que llevéis encima!», les espetaron. Uno de ellos esgrimía una porra extensible y el otro una pistola, con la que apuntó a un chico, colocándole el cañón en la frente . De repente, los delincuentes comenzaron a golpearles. Uno utilizaba la culata del arma y el otro la barra para atacar con ellas en la cabeza a las víctimas.
Los asaltantes se ensañaron con uno de los chicos. Presentaba una brecha y el dedo roto por cuatro lados y tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital de Basurto. Allí, el equipo médico decidió intervenirle esa misma noche en la lesión de la mano. Otros dos de los jóvenes también sufrieron algunas lesiones de pronóstico más leve y acudieron a un ambulatorio a someterse a las curas necesarias.
Los ladrones huyeron a la carrera hacia la zona de Zorrozaurre con los móviles que habían robado a la cuadrilla de amigos. Las víctimas ofrecieron a los policías que acudieron al lugar de los hechos una descripción detallada de los autores del robo con violencia, lo que facilitó su localización. Ambos lucían peinados llamativos. Uno llevaba rastas rubias y el otro el pelo rapado por la zona de las patillas.
De inmediato, todas las patrullas de la Ertzaintza y la Policía Municipal que se encontraban por la zona comenzaron a realizar batidas en busca de los sospechosos. Entraron en bares y en estaciones de metro. Finalmente, menos de dos horas después de los hechos, los policías localizaron a dos individuos cuyo aspecto coincidía con el descrito por las víctimas. Se encontraban en la calle Doctor Areilza. La pistola resultó ser falsa, de bolas.
Se trataba de dos jóvenes de 18 años, identificados como M.E.M. y G.C.M., con múltiples antecedentes por robos con violencia y otros delitos pese a su corta edad. Uno de ellos había estado ya en el centro de internamiento de menores de Zumarraga. La Policía sospecha que los dos arrestados pertenecen a una banda de delincuentes que se hace llamar ‘Amezola Wanda’.
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