Aficionados en caravana se irán a dormir al monte Arraiz
La carretera a la cima estará cortada desde mañana y la Ertzaintza podría restringir el acceso a pie para evitar colapsos
l. lópez | a. de las heras
Martes, 3 de septiembre 2019, 00:52
La subida al monte Arraiz, con sus rampas, va a ser el tramo más espectacular de la etapa de La Vuelta a su paso por ... Bilbao. Y, por lo tanto, uno de los que previsiblemente más público va a concentrar. El problema es que la carretera es angosta, poco apta para soportar multitudes enfáticas. En fin, que presenta «especial complicación» para los responsables de la seguridad. Así que el acceso de vehículos a este puerto de tercera categoría «va a estar cortado desde la víspera», apunta Fernando Lorenzo, jefe de Seguridad Vial de la Unidad de Tráfico de la Ertzaintza en Bizkaia. Es decir, desde la noche del miércoles.
Se trata de una de las zonas a las que más vueltas le han dado las autoridades a la hora de diseñar el operativo. De hecho, el concejal de Movilidad, Alfonso Gil, apuntó ayer que incluso se plantea la posibilidad de que la Policía vasca corte el acceso el mismo jueves a personas que quieran acceder a pie al monte. ¿No es un poco exagerado? Si se tiene en cuenta que hasta no hace muchos años los taxistas ni subían hasta allí por lo estrecho de la calzada, no. Es cierto que las cosas han mejorado, pero aún así sigue siendo una carretera muy intrincada.
Una barra portátil
En vista de semejante panorama, ya hay aficionados que se han organizado para subir al monte el día anterior con sus caravanas y pasar allí la noche. Le han llamado a José Antonio Vaz, propietario del asador Arraiz, en cuya parte trasera hay un aparcamiento de «casi 200 plazas». «Se puso en contacto incluso gente de Zaragoza para saber si íbamos a tener el parking abierto y quedarse aquí a pasar la noche». Les respondió que sí. En el negocio hostelero están expectantes porque «nunca nos habíamos visto en un tinglado como este». Lo suyo, normalmente, es un paraje tranquilo. Visto lo visto, van a montar frente al asador una «barra portátil» para servir bebidas a la afición. Dice Vaz que eso no va a compensar las comidas que dejarán de servir con el corte, pero esperan compensar las pérdidas «con la repercusión publicitaria».
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