Carnavales a remojo
La lluvia llegará este viernes para quedarse durante todo el fin de semana. Para compensar, las temperaturas se templarán y desaparecerán las heladas
Eider Burgos
Jueves, 12 de febrero 2015, 18:47
Más les vale a algunos descartar ese disfraz de tela escueta. Los carnavales en el País Vasco no serán recordados este año por el buen tiempo, todo lo contrario. Con permiso de Farolín, Zarambolas y la desdichada sardina, la lluvia será la gran protagonisa de estas fiestas.
Será este viernes cuando el agua haga acto de presencia. A última hora de la tarde llegará un frente por la costa, donde caerán las primeras precipitaciones. Para desgracia de los que tomen las calles, la situación será similar el resto del fin de semana.
En el interior tampoco se libran; allí el cielo se teñirá de gris a partir del sábado por la tarde, con el consecuente chaparrón. Que aprovechen los carnavaleros la noche, pues será entonces cuando el mal tiempo se tome un descanso en toda la comunidad autónoma. "No lloverá mucho, incluso habrá largos ratos sin agua", prevé Onintze Salazar, meteoróloga de Euskalmet.
No será así desde primera hora del domingo, cuando las nubes descarguen con más fuerza con la llegada de un segundo frente. La última jornada de la semana pone las fiestas a remojo con lluvias que podrán alcanzar los 30 litros por metro cuadrado, "aunque las cantidades exactas se afinan según se acerque la fecha, igual que las horas a las que se producirán", señala la meteoróloga.
El mercurio se templa
Más positiva es la previsión en cuanto a las temperaturas. Si se compara con días previos, los carnavales gozarán de cifras algo más elevadas. En la costa, como es natural, el ambiente será más templado, con un mercurio que oscilará entre 10 y 15 grados durante las horas más cálidas y entre 6 y 8 durante las más frías. En el interior, rondarán máximas de entre 8 y 10 grados y mínimas de entre 0 y 5. "Casi no va a haber heladas, a excepción quizá de algunos puntos más fríos en Álava", comenta Salazar.
El viento, en cambio, contribuirá al ambiente desapacible. Las zonas de interior se verán afectadas por el viento suroeste durante toda la jornada de este viernes, mientras que el sábado y el domingo cambiará de rumbo, adentrándose por el oeste y el noroeste y azotando toda la costa. Al colarse por el mar, además, el aire será más humedo.
Los disfraces de esquimal serán entonces ideales para combatir el frío, aunque el idóneo escenario que les presentó el temporal ya no vaya a repetirse. La cota de nieve se mantendrá entre los 1.300 y los 1.500 metros, relegando los copos a las cumbres más altas. El domingo, incluso, ascenderá aún más.
