Ponsarnau reparte el esfuerzo con la vista en la final

Sorprender al equipo andaluz suponía toda una hazaña. Ponsarnau administró sus recursos con la mirada puesta en Salónica y también ante el complicadísimo objetivo de sumar ayer en la Liga Endesa. Por ello empleó de inicio Kristian Kullamae, que tiene escaso protagonismo en las últimas semanas tanto en la ACBcomo la Europe Cup. El estonio se mantuvo en pista 25 minutos y 15 segundos, con lo que fue el hombre de negro con más tiempo frente al Unicaja.

Rubén Domínguez, formado en la cantera malagueña, contó con más presencia de la habitual y sumó 24 minutos y 41 segundos. El bilbaíno Iker Chacón pudo disfrutar de su tercera actuación en la competición con los 5 minutos y 23 segundos que le concedió el técnico catalán. Aunque tiene plena confianza en Tomasz Gielo, el ala-pívot polaco jugó en Málaga por encima de su media desde que ha recalado en el Bilbao Basket. En el Martín Carpena peleó durante 23 minutos y medio, cuando acumula 19 minutos de promedio durante la presente temporada como hombre de negro.

Pero había que proteger a los más valorados del arsenal bilbaíno para presentarse en el infierno de Salónica el miércoles con las máximas posibilidades de éxito. Ponsarnau siempre ha otorgado un rol fundamental a sus bases y ayer prefirió que jugasen alrededor de un cuarto de hora. Los dos lo hicieron de forma notable y confirmaron su responsabilidad y su autoridad dentro del equipo. Harld Frey estuvo sobre el parqué exactamente 16 minutos y Melwin Pantzar, 14 minutos y 35 minutos. Además, la pareja nórdica obtuvo una nota alta porque fueron de los hombres de negro más eficaces en una actuación general nada satisfactoria.

Muhammad-Ali Abdur-Rahkman, el escolta capaz de dinamitar un partido desde el exterior, también se enfrentó al Unicaja durante un cuarto de hora (15.33). Se marchó sin puntos, pero un triple suyo cerró el camino al Tofas Bursa a las semifinales de la Europe Cup y significa toda una amenaza si encuentra eficacia en el lanzamiento, como sucedió en la maravillosa remontada contra el Dijon en semifinales del torneo continental.

Recién recuperado de una lesión, el pívot estadounidense Marvin Jones jugó casi 18 minutos, casi lo mismo que unZoran Dragic sin protagonismo en Málaga. A la espera del regreso del 'cinco' titular del Surne, Tryggvi Hlinason, apartado por problemas en el gemelo derecho, los jóvenes Amar Sylla (13 minutos y 3 minutos) y Bassala Bagayoko (11 minutos y 7 segundos) completaron la rotación de interiores para preservar las reservas de Jones.

El fenómeno belga

Ponsarnau usó el mismo plan con Thijs De Ridder, el poderoso y versátil ala-pívot que se ha ganado un puesto destacado en el equipo porque está alcanzado una enorme regularidad y aporta en defensa y ataque. Aunque ayer dispuso de sólo 13 minutos y 41 segundos, el belga ofreció una auténtica exhibición con 19 puntos y un 24 de valoración individual, la máxima del encuentro. Sólo el inspirado Killian Tillie, con 20 puntos y cuatro triples, superó al número 11 de los bilbaínos, un jugador de 22 años que no deja de sorprender.