Hervelle: "Vamos a llegar a la final y luego ya veremos"

La ilusión está disparada en el Bilbao Basket. A la brillante temporada que están protagonizando los hombres de negro en la Liga Endesa tras el verano más convulso de su historia se ha sumado la ambición desatada de la Copa. Clasificarse para el torneo del k.o. no era en absoluto un objetivo prioritario al comienzo del curso, pero el genial papel que han firmado los de Sito Alonso ha generado una expectación máxima en el entorno de Miribilla y ha alimentado la voracidad de la propia plantilla. "Vamos a llegar a la final. Y luego ya veremos", ha proclamado Axel Hervelle, que se ha recuperado a tiempo para disputar el torneo que se celebrará entre el lunes y el domingo en Gran Canaria.

El restablecimiento exprés del pívot belga, casi descartado para la Copa cuando sufrió su lesión, es quizás el ejemplo más paradigmático de la dimensión que ha alcanzado el deseo del Bilbao Basket de reivindicarse. Incluso a pesar de sufrir una derrota ante el Sevilla en la última jornada y de tener que enfrentarse al líder Unicaja en el primer asalto, los hombres de negro confían en realizar un papel estelar en una de las competiciones más atractivas del baloncesto de primer nivel. "Vamos a ir a la Copa a ganarla", aseguraba Sito Alonso en las páginas de EL CORREO. La plantilla, sin duda, ha secundado el reto propuesto por el técnico. "Vamos a muerte con él", ha lanzado Hervelle.

"Miedo ninguno"

"Vamos a ir allí a ganar, a darlo todo. La gente está con muchas ganas, muy motivada y con especial ilusión", ha asegurado el pívot. La confianza que poseen ahora los jugadores del Bilbao Basket, sin embargo, no hay que confundirla con exceso de confianza, ya que el vestuario de Miribilla se ha mostrado consciente de la exigencia que supone tumbar al Unicaja a las primeras de cambio, cuando también el conjunto malagueño atraviesa un renacimiento dorado. "Es un equipo que sabe dónde está y tiene un cuerpo técnico ideal para estar siempre al máximo nivel. Les tenemos mucho respeto, pero miedo ninguno", ha asegurado Hervelle. El reflejo de un equipo insaciable y una hinchada hambrienta.