«A los jugadores que están solos y lejos de su país se les hace muy duro»

- ¿Cómo lo lleva?

- Intentando hacer cosas. Por las mañanas entrenamos con nuestro preparador físico, todos juntos. Después ver películas, algunas series, leer un poco, pero ya he acabado los libros que tenía en casa. Hablar con mi pareja e intentar divertirnos un poco con cosas de las redes sociales, vídeos y cosas así.

- Es un reto personal porque entre dobles sesiones y viajes no suelen estar demasiado en casa.

- Quizá es lo único bueno que tiene lo que está pasando, si se puede decir así. Tienes más tiempo para estar con la familia. En mi caso disfruto de tener más tiempo con mi pareja. Los que tienen hijos también. Pero hay jugadores que están solos y se les hace más duro porque están fuera de su país, lejos de la familia, solos en su casa en Bilbao sin poder hacer nada.

- ¿Se cuidan unos a otros aunque sea virtualmente?

- Tenemos un grupo de wasap donde hablamos, mandamos vídeos divertidos, otros no tanto, hablamos más para que la gente que está sola no se sienta mal. Con Tomeu (Rigo) hablo más porque es casi como mi hijo, por ser un chico joven y buen amigo mío.

- Muchos están al lado, y no se pueden o deben ver.

- Es muy extraño tener gente tan cerca con la que vas a diario al pabellón y haces cosas, comes... y ahora no podemos. Pero nos vemos porque salimos a la ventana y hablo con Tomeu y con Quentin (Serron), que está justo en el piso de abajo y así podemos vernos un ratito.

- ¿Quién lo puede estar pasando peor en la plantilla?

- Tyler (Haws) y Quentin, los que tienen familia e hijos y no están con ellos. Es lo más jodido porque nos les puedes ver durante tanto tiempo.

- Alguno debe haber gastado ya el mando de la 'Play'.

- (Ríe) Imagina los jóvenes con los videojuegos. Los primeros dos días estaban encantados por poder jugar todo el día. Después hasta te aburres.

- Me cuesta imaginar a Ben Lammers harto de estar ante la pantalla.

- Bueno, él lo tiene mejor y seguro que aprovecha el tiempo para construir algo (carcajada).

- ¿Qué noticias tiene de cómo están las cosas en su país, Austria?

- Hablo a diario con mis padres, que ya son mayores, y mis dos hermanas. Por ahora todos están bien. Allí tampoco hay clases, ni restaurantes abiertos, pero la gente si quiere puede salir de casa a pasear o hacer cosas. No es tan estricto como aquí, de momento.

- Lo deportivo parece algo del pasado.

- Sí, es una pena porque con el muy buen trabajo que hemos estado haciendo, es una temporada excepcional tanto por las victorias como por la química del vestuario y la manera como jugamos. Pienso en el último partido contra Obradoiro y se vio el equipo que somos.

- Haga de aficionado. Cuando ve un partido del RETAbet, ¿qué piensa?

- Me gusta lo que veo, un equipo con mayúsculas y eso es mérito de Álex (Mumbrú), porque para él es fundamental que todos se sientan importantes en el equipo, los doce jugadores. Casi todos estamos entre 16 y 20 minutos, nadie juega treinta. Todos tenemos nuestras opciones en ataque, defendemos en bloque cada uno ayudando al resto. Jugamos de manera espectacular y la gente lo disfruta en Miribilla.

- No ha habido mucho tiempo para comprobarlo, pero este Bilbao Basket seguía con punch sin Bouteille.

- Por eso se nota que somos un equipo. Hemos fichado dos buenos jugadores y personas que se han adaptado muy rápido a la química del vestuario. El secreto de nuestra gran temporada no era un jugador, era el bloque y cómo funcionamos como equipo.

- En verano llegó a ser recurrente la sensación en el entorno ACB de que este año bajaban el RETAbet y otro equipo.

- Era la gente de fuera. El cuerpo técnico siempre nos ha dado la confianza de lograr éxitos basados en el trabajo diario. Hemos creído en eso más que en lo que decían fuera. En Portugal en la pretemporada no jugamos bien, pero allí empezó a construirse este equipo, haciendo cosas juntos. Se vio que la química era buena y eso en pretemporada es más importante incluso que el baloncesto.

- ¿Qué va a pasar?

- No sé cómo harán las cosas. Debemos escuchar a la gente que sabe de esto, al entrenador, club, ACB y al Gobierno. Haremos lo que nos digan.

- ¿Si se alargara el confinamiento se le pasaría por la cabeza ir a Austria?

- Yo me quedo aquí. Soy un bilbaíno más y esperaremos lo que sea necesario para finalizar la temporada. Es lo que deseamos. Tratamos de mantenernos en forma haciendo las cosas que se pueden en casa y estar preparados para cuando toque.