El Bilbao Basket trabaja en el fichaje de un tirador que debería cerrarse en breve

El club está en el mercado porque entiende que necesita reforzar la plantilla y dar más elementos a Ponsarnau con los que construir un baloncesto más sólido y productivo de cara al aro rival. No es ningún secreto que el equipo necesita puntos -el Bilbao Basket es el cuarto peor anotador de la ACB- y de ahí que la posición de dos pida a gritos un hombre capaz de amenazar y marcar diferencias ya que ni Ali ni el ahora lesionado Kullamae han logrado soltar las amarras y volar. Encima la lesión del estonio, que estará hasta un mes de baja, se produce justo en un momento complicado, con el Surne inmerso en una dinámica negativa traducida en una sola victoria en las últimas ocho jornadas de la ACB.

No será americano

La llegada de un nuevo tirador con Ali y Jones en la plantilla descarta que sea un americano, por lo que tendrá pasaporte europeo o será cotonou -jugadores que provienen de África, Caribe y Pacífico y no ocupan plaza de extranjero-. La idea que maneja el Bilbao Basket es hacerse con los servicios de un profesional con buena mano y fundamentos en el uno contra uno, capaz de generarse puntos y al mismo tiempo ser una amenaza y abrir así espacios a sus compañeros. Una especie de Adam Smith o Goudelock, gente que convierte desde la línea de triple y también sabe buscarse la vida con penetraciones y bandejas.

Porque el Bilbao Basket debe arreglar sus problemas de anotación, agravados con el paso de las jornadas. En los últimos cuatro partidos, contra Girona, Joventut, Zaragoza y Lleida, no ha llegado a los 80 puntos, una frontera que la ACB exige franquear con frecuencia para optar a la victoria. La franquicia de Miribilla es el cuarto equipo menos anotador de la liga (80,2), solo por delante de Granada (77,4), Girona (77) y Breogán (72,4). En el derbi frente al Baskonia y luego ante los ilerdenses, el Surne no pudo alcanzar siquiera los 70 puntos. La falta de puntería es un mal que aqueja a una plantilla sin 'killers' capaces de castigar con regularidad. Solo Muhammad-Ali Abdur-Rahkman promedia más de 10 puntos por choque (10,1), un escolta que acredita porcentajes de acierto bajísimos. Y con la lesión de Kullamae urge reforzar el puesto de dos.

Habrá que aguantar unos días hasta conocer quién es el elegido por el Bilbao Basket, que tiene muy encarrilado el fichaje. Y tal vez no sea el único porque según cómo vayan las cosas, el club estudiaría incorporar más piezas en otros puestos si la plantilla lo necesita. Pero de momento la atención está puesta en la contratación de un escolta que aporte desde el primer momento y ayude a superar la mala racha por la que atraviesan los hombres de negro.