Tiempo para la rehabilitación de Sedekerskis, que descarta jugar con Lituania

El báltico estaba exhausto. Llevaba cerca de 15 minutos sin sentarse, lo que antes de su última lesión muscular era el pan de cada día, cuando su fortaleza física casi le impedía pensar en cansancio. Como un buen afiliado del duskismo. Pero el último contratiempo, una rotura en el aductor de la pierna izquierda, le ha hecho revivir el calvario de bajas que padeció hace dos temporadas, con hasta cuatro momentos de ausencia y 23 encuentros sin convocar. Un mal recuerdo que el lituano pretende esfumar de su cabeza.

Por el momento, ha tomado la decisión de no acudir con su selección la próxima semana. Lituania disputará los dos últimos duelos de la fase de clasificación para el Eurobasket de este verano, para el que ya tiene asegurado el billete. Sedekerskis se ha convertido en un fijo en los últimas dos campañas en el combinado báltico, pero ayer confirmó a los medios locales que esta vez se quedará en Vitoria. Su idea es formar parte del calendario de entrenamientos de Pablo Laso y seguir trabajando de manera individual en fortalecer su físico.

Dos contratiempos musculares han dejado al canterano azulgrana en el dique seco durante diecisiete partidos de los 46 celebrados hasta la fecha. Después de volver a la cancha el domingo anterior ante el Unicaja, aún deja muestras de no estar al 100% de confianza. En un contragolpe del partido del Maccabi parecía correr algo cohíbido y lejos de su explosividad y apenas dispuso de diez minutos de juego, pocos más que en Mónaco. En el Principado se quedó sin comparecer toda la segunda parte.

Ayer tarde le dio la vuelta a la situación. Fue el jugador azulgrana más valorado del encuentro (26 créditos). Sus estadísticas tampoco fueron descollantes, 12 puntos y 6 rebotes en 29 minutos, el que más jugó, como sí la sensación de volver a ser un baluarte en defensa y de imponerse en el cuerpo a cuerpo en las inmediaciones del aro. Al lituano le tocó actuar por tramos como ala-pívot e incluso de 'cinco' por la baja de Diop y la concurrencia en faltas personales de Donta Hall. «Tadas ha cumplido», se congratuló Laso en sala de prensa. «Además de para que coja el ritmo, queríamos también que sumara minutos ante un rival como el Granada por cómo está formado el equipo», aseguró el técnico.El conjunto nazarí destaca por su juego exterior, ahí donde en varias ocasiones el entrenador vitoriano ha reconocido que a su equipo «le cuesta».

Sedekerskis solventó con buena nota el desafío y recuperó la sonrisa. Además, fue el protagonista de la nueva vuelta de tuerca del club por tratar de mejorar la experiencia de los aficionados en el partido. El lituano, como MVP y como capitán, hizo los honores de comandar un palmeo similar al instaurado ya en los inicios del partido con un bombo de considerables dimensiones. Se afanó tanto en su labor, que en el último golpe perdió el cabezal del mazo.

La situación generó la carcajada de un Savkov que agrada al Buesa. Su nombre fue coreado antes de que Laso le volviera a dar la oportunidad con casi cuatro minutos por delante. Falló sus tres primeros tiros, pero su triple fue la canasta más celebrada. El ruso abrió los brazos casi como señal de disculpa. «Hemos movido el banquillo para que no se nos fueran de minutos jugadores más cargados», explicó Laso, que, por contra, sigue sin contar con Ndiaye. Ayer otra vez inédito.