La Policía interroga a Mike James por los pasaportes falsos

El espinoso asunto de los pasaportes falsos sigue enturbiando el baloncesto europeo. Esta vez, con un exbaskonista en el centro de los focos, Mike James, ahora en las filas del Panathinaikos, que fue interrogado en Barcelona junto a su compañero KC Rivers, exjugador del Real Madrid, cuando el equipo griego visitó al Barcelona en Euroliga, el pasado 1 de diciembre. Según ha informado el diario El Mundo, los dos norteamericanos fueron requeridos por la Policía Nacional cuando aterrizaron en el aeropuerto de El Prat, acusados de un presunto delito de falsedad documental.

Se les atribuye una actuación ilícita con ánimo de lucro. Concretamente, la falsificación de sus pasaportes para poder jugar en la Liga ACB con la nacionalidad de Guinea-Bissau, que les permite competir con la condición de Cotonou y, de este modo, evitar ocupar plaza de extranjero en sus respectivos clubes. Ambos fueron puestos en libertad tras prestar declaración ante la UCRIF (Unidad Central contra las Redes de Inmigración y Falsedades Documentales), perteneciente a la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras, y los hechos fueron trasladados al Juzgado de Instrucción número 1 del Prat de Llobregat.

Colton Iverson, investigado

Es el enésimo capítulo de una operación que ya constató la falsedad de los pasaportes de otros jugadores con pasado ACB, Andy Panko y Marcus Slaughter, y conllevó la detención de Aldo Darío Herchhoren, ciudadano argentino acusado de hacerse pasar por cónsul honorario del país africano y denunciado tanto por la embajada de Guinea Bissau como por la propia ACB. El letrado fue imputado por falsedad documental, estafa y usurpación de funciones al manipular los pasaportes de los dos jugadores -también fue el encargado de sellar el salvoconducto guineano de Rivers-.

El caso, además, afecta a otro exbaskonista como Colton Iverson, que adquirió la ciudadanía del país africano horas antes de que se abriera la temporada 2014-15 con la Supercopa en Vitoria. La de Mike James se consumó con el curso ya avanzado -llegó a Vitoria en diciembre de 2014 procedente del Kolossos griego-, cuando el Laboral Kutxa necesitaba liberar una plaza de extracomunitario tras fichar a Hansbrough. Finalizada la campaña, Iverson rompió su contrato mediante una denuncia por impagos ante la FIBA para firmar por el Pinar Karsiyaka turco.

El base continuó una campaña más en el Buesa Arena, pero no actuó como comunitario porque, según explicó el consulado de Guinea-Bissau en Bilbao, su pasaporte «no estaba en regla» cuando el Baskonia quiso renovarlo. La investigación, que vivió una nueva vuelta de tuerca en El Prat, puede derivar en la apertura de una causa judicial para depurar responsabilidades solo en la persona de los jugadores.

Mike James fue reclutado por el Baskonia en diciembre del año 2014. El base, procedente de las filas del Kolossos Rodas, llegaba a Vitoria con la vitola de ser el máximo anotador de la liga griega. Su puerta de entrada al Viejo Continente fue el KK Zagreb, donde apenas duró tres meses para después incorporarse al Hapoel Kazrin israelí a principios de 2013.

Antes de recalar en el equipo alavés, donde militó hasta este verano, defendió también los colores del Paffoni Omegna, de la Tercera División italiana, para después recalar en las filas del Kolossos Rodas antes de la llamada azulgrana.

Sistema de cupos

La ACB ya ha manifestado anteriormente su intención de «ejercitar las acciones convenientes en defensa de los intereses de la competición, a favor del juego limpio y para el esclarecimiento de los hechos». Su normativa obliga a los clubes a tener un mínimo de cuatro jugadores formados en España, un máximo de dos extracomunitarios y el resto de jugadores con pasaporte europeo o Cotonou. La Federación Española de Baloncesto es la encargada de otorgar la licencia una vez revisados los papeles y el CSD es quien emite el visado de trabajo.

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