Bargnani mantiene la incógnita sobre su dolencia

Dudas que siguen siendo dudas, enigmas que quieren continuar siéndolo y secretos de enfermería. Muchas incógnitas y pocas certezas. A escasos tres días para la disputa de la Supercopa en el Buesa Arena, el aficionado del Baskonia tiene todavía varias cuestiones sin resolver. Se da por hecho que Beaubois no llega, aunque cosas más raras se han visto; Shane Larkin es optimista en el límite de los plazos y Shengelia asegura que su rodilla está en perfectas condiciones, pese a aquel anuncio de molestias de la Federación Georgiana. Y está la incertidumbre absoluta que envuelve la lesión de Andrea Bargnani.

El pívot italiano no aclaró nada sobre su posible estreno con la camiseta azulgrana. Ni sí ni no, ni todo lo contrario. «Intentaré estar lo antes posible, tan pronto como pueda estar en la cancha lo haré, ya que estamos trabajando para que eso ocurra, siguiendo las instrucciones de los médicos», dijo el jugador procedente de los Nets, que arrastra molestias en un pie desde que llegó a Vitoria. La misma respuesta para todas las preguntas relacionadas con su recuperación. Una incógnita total para la Supercopa, aunque esa estudiada ambigüedad no invita a la esperanza.

Una ausencia, de confirmarse, fundamental, ya que el cinco romano es la principal apuesta del Baskonia para el presente ejercicio, aunque él, «ansioso» por debutar, subraya que «todos los jugadores son importantes y el entrenador nos necesita a todos». Más, si cabe, después de una pretemporada tan atípica. «No ha sido fácil, pero estamos preparados para juntarnos todos y trabajar duro para hacer una buen año», concluyó Bargnani.

Mensajes enigmáticos

Tampoco Larkin pudo resolver su duda. «Veremos si puedo jugar el viernes. Es un secreto», apuntó con una sonrisa enigmática. «Tengo que hablar con el doctor y probarme en el entrenamiento. Es un proceso de día a día. Si todo va bien, probablemente juegue. Quiero hacerlo, así que...», precisó en un tono más serio. Los deseos del base, en cualquier caso, pueden chocar en este punto con la recomendación médica que le diagnosticó un período de baja de dos semanas que precisamente se cumplirán mañana, el día del estreno.

La presencia más probable entre los dudosos. En el otro lado, Rodrigue Beaubois, que, según esos diagnósticos iniciales, tendría complicado hasta disputar la primera jornada de la Liga ACB, el sábado 1 de octubre en la pista del Obradoiro. Pero el escolta francés se quiso apuntar también al juego del despiste. «No puedo dar una fecha exacta, pero muy pronto», respondió cuando fue interrogado sobre su vuelta a la cancha. ¿Antes de lo esperado? «No lo sé», despejó con la misma sonrisa que Larkin.

Áspero Shengelia

Sí estará, en principio, Tornike Shengelia, que hizo saltar las alarmas en Vitoria cuando la federación de su país explicó públicamente que el ala-pívot se había perdido el último partido con su selección por «una lesión de rodilla», apostillando que no era grave. «No era solo eso, eran unas cosas personales; si no, habría jugado», precisó el protagonista, que quiso lanzar un mensaje de tranquilidad a la afición azulgrana, si bien parecía incomodarle el tema. «Estoy bien», repitió hasta en cuatro ocasiones con un tono áspero creciente que terminó rozando la hosquedad.

Y es que el cansancio de las tres horas de atención a la Euroliga pareció hacer mella en una plantilla que llegó cansada al Media Day organizado por el club para los medios locales. «No quiero decir nada más, no quiero pensar en esto mucho, estoy bien y ya está, no quiero hablar más de lesiones», zanjó Shengelia, que prefirió centrarse en el rol de líder que ha desempeñado con su combinado nacional en el Preeuropeo, donde ha promediado 17,2 puntos y 8 rebotes. «Espero que el entrenador me vea también en ese papel».

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