El Trofeo Diputación se queda en casa

Tras el pinchazo de la Supercopa con el Barcelona -primer rival también del Laboral Kutxa en la Liga Endesa que arranca este sábado, 20.45 horas- no pintaban bien las cosas ayer en las gradas del Buesa cuando el Baskonia deambulaba 18 puntos abajo ante el Khimki ruso. El torneo, el Trofeo Diputación, era lo de menos. No deja de ser un encuentro de pretemporada, pero la imagen sí que preocupaba. Y entonces se tocó fondo, se rebotó y comenzó una magnífica remontada liderada por Thomas Heurtel que llevó a su todavía equipo a vencer 86-79 a un Khimki, que bien es cierto se vino abajo en la segunda parte. El equipo ruso bordó el baloncesto y destapó las limitaciones del conjunto local en los primeros veinte minutos (29-44), pero el Laboral Kutxa fue limando la desventaja y tomó el mando del duelo a falta de seis minutos para el final. Los de Crespi despejaban muchas dudas sobre el parqué. Las que envuelven la conrtinuidad del tionel galo, en cambio, continúan.

Y encima es que Heurtel fue ayer el mejor del equpo. Con 18 puntos, fue resolutivo con sus acciones en el tramo final para que el Baskonia lograra el triunfo después de anotar 55 puntos en la segunda parte por 35 del Khimki. San Emeterio también estuvo a la altura para aguantar a su equipo, con 14 puntos, y de los nuevos fichajes Iverson, con 13, fue el más entonado.

Desértico Buesa Arena

En un desértico Buesa Arena, el Laboral Kutxa intentó lamer sus heridas tras el batacazo en la Supercopa y mostrar sus progresos a los pocos aficionados que asistieron al encuentro.

El equipo de Marco Crespi, más que disipar las dudas, lo que hizo en la primera parte fue aumentarlas. Sólo una canasta en los primeros siete minutos evidenció el pobre momento del Baskonia, ante un Khimki que con un puñado de buenos jugadores disfrutó con las carencias del conjunto vitoriano.

El 9-21 del primer cuarto mostró la sideral diferencia entre ambos equipos, que llegó incluso a los 17 puntos en el ecuador del segundo (14-31).

Levantó el pie del acelerador el equipo ruso y, a pesar de no emplear a sus mejores elementos en la recta final del primer tiempo, llegó al descanso con una cómoda renta (29-44).

El tercer periodo permitió contemplar en su recta final a un Baskonia más atinado que llegó a enjugar la abultada diferencia (54-58, minuto 29), pero dos jugadas de calidad de Rice volvieron a poner tierra de por medio para un Khimki que llegó al minuto 30 con 57-63 tras un triple, fuera de tiempo, de San Emeterio que los colegiados concedieron.

Causeur, recuperado

El Khimki se dejó llevar en exceso y dos canastas de Causeur pusieron por delante al Baskonia (67-65, minuto 34). Un parcial de 15-2 en cinco minutos permitió soñar con el triunfo a los locales (72-65).

Dos triples y dos tiros libres de Popovic, con un mate del imparable Lauvergne permitieron volver al duelo al equipo ruso (75-75) con menos de dos minutos por jugar.

Thomas Heurtel cogió los galones para encadenar cinco puntos que, con un mate posterior de Iverson, dejaron el Trofeo Diputación en Vitoria.