La mala circulación atasca al Baskonia

No es tanto que el Baskonia lo haga peor, que lo hace, como que el resto ha mejorado su actuación. El Madrid, líder, rescata hasta 41 balones escupidos por los aros cada noche. Es una de las razones, no la principal, de que los vitorianos estén fuera de la Copa, con un balance negativo de cinco victorias y seis derrotas, mientras la campaña anterior, por estas fechas, eran segundos, con nueve triunfos. En el anterior paso de Velimir Perasovic por el banquillo, en la 2015-16, completaron el primer tercio quintos, con un 7-4.

De todos modos, y aunque no rebotear fácil frena mucho el contraataque, los verdaderos problemas de circulación de los azulgrana vienen por la falta de asistencias. De media, 14,6. El decimoquinto equipo del torneo. Era el mejor con 19,2 por noche en la anterior liga. Y 19,3 una antes. En la 2015-16, cuando Perasovic llevó al equipo a la Final Four de Berlín, los números se parecen más a los actuales. 14,5 asistencias, que hay que ponderar con las 14,2 pérdidas que entonces se cometían.

A nadie se le escapa que los balones regalados al rival son otra de las losas. 13,8 perdidos por partido, el octavo que más en ACB, es lo que reza la estadística. El año anterior eran 12,5.

En Euroliga, con mejores sensaciones clasificatorias e igual balance 5-6, los números insisten en la misma idea. Los baskonistas asisten a sus compañeros en 13,9 ocasiones y malgastan otras tantas posesiones. Un retroceso respecto a los 18,3 pases y 12,9 pérdidas de la 2018-19, o las 19,5 asistencias y 12,6 pérdidas de la temporada anterior. El curso de la final en la capital alemana eran 15 asistencias y 13,7 pérdidas. Muy parecido a lo actual, mas insuficiente en unas competiciones, la europea y la doméstica, que han elevado el nivel.

El máximo asistente del equipo es Pierriá Henry. En ACB distribuye 4,7 de media. En Europa, 3,5. Un poco menos que Vildoza, que se va a las 3,9 en esa competición. No son malos números, pero esconden un problema que no aparece en las estadísticas: el patrón temporal. Muchos de los números del Baskonia en las once jornadas han llegado con el marcador decidido.