Dos gigantes baskonistas de pisada inestable

El joven interior llegado del Gran Canaria hace ya dos veranos se ha visto sometido a mayores fluctuaciones de protagonismo en su segunda campaña en Vitoria. Así lo ejemplifican sus últimas semanas, en las que los problemas físicos en sus rodillas le relegaron a la suplencia para después convertirse en el pívot elegido por el técnico vitoriano para arrancar los partidos.

Puede ser una mano tendida desde el banquillo para un jugador de evolución lenta dentro del exigente ecosistema del Baskonia. Diop frenó en seco en la pasada campaña debido a la lesión sufrida en la muñeca izquierda que requirió un paso por el quirófano y un largo período de inactividad desde febrero de 2024 hasta el inicio del presente curso. Aquel receso le privó del trabajo individual inicialmente previsto por el club azulgrana que debía alternar con su aportación a un plantel que el curso anterior tuvo a Joan Peñarroya y Dusko Ivanovic como jefes de banquillo.

Ya con el alta médica, el botón de reinicio ha deparado un Khalifa Diop con problemas para alcanzar su mejor versión. La imagen general que traslada es la de un baloncestista de pisada poco firme, con dudas en la toma de decisiones sobre la cancha y que sufre para imponer su privilegiada 'percha' muscular. Diop deja detalles para el optimismo cuando busca las continuaciones hacia el aro tras bloqueo o cuando hace asomar su capacidad intimidatoria. Pinceladas dispersas que todavía no conforman un cuadro completo. Sus promedios en el presente ejercicio son 3,4 puntos, 4,1 rebotes y 5,5 de valoración.

Si a Khalifa Diop no le sonríen los números, Donta Hall es un seductor de la estadística. Las cifras le acompañan e incluso llegan a tapar en más de una ocasión actuaciones con más de una sombra. En su primera campaña como baskonista, promedia 8,3 puntos, 5,4 rebotes y 13,5 de valoración. Para bien o para mal, es el 'cinco' de confianza de Pablo Laso, que asume la obligación de lidiar con un jugador explosivo, capaz de desplegar ese estilo 'aéreo' que en tantas ocasiones le lleva a ser protagonistas en la selección de las mejores jugadas de cada jornada en Euroliga y Liga ACB.

Pero Donta Hall también se trata de un jugador de carácter disperso, que ha demostrado un nivel de concentración variable dependiendo del partido y del escenario. Su capacidad para impulsarse por encima del aro le convierte en un socio perfecto en el 'alley oop', pero el flanco débil de su perfil muscular es la limitación de kilos para medirse a pares con mayor peso y corpulencia. Perfiles como el de Tyrese Jones, a quien se enfrentó el viernes pasado en Belgrado, son pura kryptonita para Donta Hall. El problema llega cuando Ben Lammers, del Andorra, se convierte en el poste estelar del partido con la permisividad de los dos cincos azulgranas, tal y como sucedió en la última derrota azulgrana.