Cuesta de enero a los pies de la Alhambra

«El calendario es excesivo para los jugadores porque no tenemos las mismas condiciones ni de descanso ni de preparación que en la NBA, pero es lo que hay», lamentaba ayer Peñarroya horas antes de tomar el avión dirección de Granada, donde la plantilla llegó bien entrada la noche. Allí dormirán también hoy tras salir del Pabellón de los Deportes de Granada alrededor de las doce antes de despegar mañana hacia Berlín,, con los trece jugadores disponibles formando parte de la expedición, en el que será el jueves el segundo de los seis partidos a dispautar en apenas doce días. Sin «desgracia» en forma de lesiones graves –«tocamos madera»– aunque con Kotsar algo renqueante de un golpe en la mano sufrido contra el Madrid y varios integrantes con problemas víricos en los últimos días. «Por cosas así hay que dar descanso».

Contratiempos que no empañan una situación «privilegiada». En plena racha de once victorias, líderes de la Euroliga y con un pase para la Copa encarrilado. Aunque para Peñarroya todavía lejos de ser una disposición «ideal», reconoce estar disfrutando. «Cuando estás en un club como éste, el fin es luchar por ganar títulos pero yo me quedo con el camino».

El técnico azulgrana destaca la «importancia» de que «el equipo juegue bien y enganche a su afición durante la liga y no solo pensar en el final». «Jugadores, médicos, fisios, cuerpo técnico está haciendo un gran trabajo, pero estamos a 2 de enero», atemperaba ayer. También ensalzó «la paciencia» de la dirección deportiva para incorporar a Henry, clave en la racha de victorias.

La maratón de partidos arranca con un Granada mermado por las lesiones. «Al equipo le he transmitido que jugamos contra un rival que lo ha hecho muy bien y si no tiene más victorias es por las lesiones de sus dos referentes ofensivos». La corta extensión de la plantilla nazarí sin Luke Maye y Cristiano Felicio y sus limitaciones económicas para fichar ha provocado un bache de cinco derrotas seguidas, pero el catalán no se fía «porque juegan un buen baloncesto». La manija del recién ascendido la lleva Álex Renfroe, el que fuera el base titular de Peñarroya en sus tres títulos continentales con el San Pablo Burgos. «Es uno de los jugadores importantes de mi carrera y conocerlo me da un plus, pero con su experiencia nos la puede liar».

El Baskonia podría sellar matemáticamente el billete para la Copa que ya tiene asegurado virtualmente con las diez victorias. El siguiente paso natural es luchar por ser cabeza de serie en una liga muy igualada, algo que no obsesiona al preparador azulgrana. «Sería imposible vivir con la sensación de que no podemos fallar nunca. Si podemos ser primeros, mejor. Si es séptimos, séptimos. Cuando llegue el momento de los enfrentamientos… Te toca el Unicaja, el Valencia... Cualquiera que te pueda ganar», señaló. Tampoco tiene el foco puesto en mejorar el rendimiento de Enoch, el jugador con menor ritmo de la plantilla tras su lesión de dos meses. «No está por debajo de lo esperado. Ya lleva partidos funcionando bien».