La peor cara es la de fuera de casa
El Athletic no es capaz de dar un paso adelante en su juego como visitante, aunque celebra haber cedido sólo un gol en cuatro partidos
El Athletic 2019-20 tiene dos caras. Una es arrolladora. Es la que ha mostrado en casa. La otra es industrial. Es la que saca ... como visitante. El partido de poco Getafe fue empeorado esta noche en Palma. Al acabar el duelo comenzó una tormenta sobre Son Moix. Los rayos parecían quejarse del pobrísimo duelo presenciado pese a un final de infarto con dos penaltis fallados y dos balones en los postes.
Era la primera vez en la que Gaizka Garitano repetía equipo, algo que no había sucedido en los anteriores 31 partidos. El entrenador resolvió mantener a Unai López en el campo y dejar fuera a Beñat. Por primera vez, el donostiarra jugó dos encuentros como titular con los rojiblancos. Eso sí, sigue sin ganarse toda la confianza. Sólo ha disputado dos completos de sus 32 en el equipo.
El Athletic se vio muy sometido al Mallorca. Las dos tarjetas que vieron los medios centros, Unai López y Dani García, marcaron mucho el duelo. Condicionados para no verse expulsados, los rojiblancos dejaron mucho margen de maniobra al ex baracaldés Baba y al veterano Salva Sevilla.
Eso explica en gran parte que el Mallorca dominara buena parte del duelo y creara un buen puñado de ocasiones. Los locales dispusieron de un penalti fallado, un gol anulado, un poste y una oportunidad clarísima que Lago Junior cruzó en exceso. Es probablemente, el partido de la era Garitano que más ha cedido su equipo. Y eso sin contar con la manifiesta superioridad de los baleares en las jugadas a balón parado.
Yeray lamentaba que hubo dos Athletic, uno que estuvo sólido atrás en la primera parte y otro más inestable en la segunda. «Hasta el tramo final no nos han creado peligro. En el arranque hemos estado tranquilos atrás, casi no han tirado. A raíz del palo de Salva Sevilla han tenido ocasiones, aunque nosotros también en un partido que ha sido muy loco y muy parejo y que nos deja contentos por el punto», mantuvo.
El equipo llega a la jornada ocho con una notable recaudación de puntos, ocho, pero dos perfiles muy distintos. En casa ha firmado tres goles y momentos memorables, pero fuera tienen más carácter que juego. Sólo ha anotado un tanto, aunque eso sí pueden mostrar orgullosos una magnífica estadística, apenas ha cedido un gol en cuatro encuentros. Sólo Sevilla y Alavés, aunque con un partido menos, están tan firmes atrás. Este dato iguala el mejor registro histórico del club. Sólo se había dado en cinco ocasiones, la última de ellas en la decepcionante campaña de Ziganda.
Con Heynckes
La plantilla mira a los resultados para animarse. Es el mejor arranque rojiblanco en las seis últimas campañas. Es la denominada media inglesa, ganar en casa y puntuar fuera. Haber ganado colocaría al equipo con diez puntos, una situación que no se da desde 1993 con Heynckes en el banquillo. «No perdemos y hemos mantenido otra vez la portería a cero. Llevamos buenos resultados pese a que nos hemos medido a cuatro rivales importantes en el arranque de Liga», reflexionó Yeray. El central dio uno de los sustos de la noche al caer al suelo con una torcedura de tobillo. «Por suerte no ha sido nada», tranquilizó
El paso adelante fuera de San Mamés cuesta a los rojiblancos, como reconocían los jugadores en la zona mixta. «Nos ha costado imponernos fuera de casa», lamentó Yeray. «Vivimos mucho de recuperar el balón y sacarlo a las bandas para jugarlo y atacar desde allí. En este partido no ha sido posible». Ninguno de los dos extremos, Córdoba e Iker Muniain, estuvo bien. Larrazabal fue el mejor de los de los costados en los pocos minutos que jugó. Ibai Gómez, que podría haber colocado balones a Aduriz y Raúl García, ni saltó al campo.
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