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Ni contra diez, ni contra nueve, ni en 112 minutos de juego, ni de penalti... El Athletic ha entrado en un mundo de tinieblas ofensivas ... impensable un par de meses atrás. Como si el 7-1 al Valladolid o los tres goles a la Roma hubieran servido para descargar todo el arsenal atacante, el equipo ha entrado en una crisis goleadora en un momento trascendental de la temporada, Ya acumula tres empates a cero consecutivos -Osasuna, Villarreal y Rangers- o lo que es lo mismo, más de 300 minutos sin ver puerta. Un encadenado que no sucedía desde 1986, con Iribar en el banquillo, cuando el Athletic empató sin goles frente al Sporting, Zaragoza y Racing. Fue Yeray, en la recta final del duelo contra el Sevilla en el Pizjuán, el último rojiblanco en ver puerta. Si ponemos el foco en los delanteros hay que ir hasta el anterior partido europeo, el 3-1 frente a la Roma, donde Nico Williams anotó dos de los tres goles que sirvieron para eliminar al equipo italiano y comparecer anoche en Ibrox, en un duelo donde de nuevo el Athletic no sufrió en tareas defensivas pero estuvo desacertado en ataque.
Problemas por las bandas
El Rangers cierra a los hermanos Williams
Barry Ferguson tenía claro que no podía dejar crecer al Athletic por los costados y puso de salida una línea de tres centrales y dos carrileros que tuvo que modificar con la expulsión de Propper. De este modo, Tavernier se convirtió en la sombra de Nico Williams mientras Iñaki se las tenía que ver con las vigilancias de Balogun y Yilmaz. El marcaje del capitán Tavernier fue de libro a Nico, sin dejarle respirar, hasta el punto de que mediada la primera parte llegó el primer cambio de banda de los hermanos, en busca de soluciones que no llegaron.
En los últimos partidos tanto a Nico como a Iñaki les está pasando factura la acumulación de esfuerzos, les está costando más profundizar y sacar rendimiento de su velocidad por las bandas, y el Athletic lo está notando. De hecho, Valverde dio entrada a Berenguer en la segunda parte, lo que llevó a Nico a abandonar una banda izquierda donde estaba perfectamente frenado, para buscar pases interiores que tampoco llegaron.
Regreso sin brillo
Sancet no encuentra su sitio en su vuelta al once
Es un futbolista fundamental en este Athletic y se esperaba su regreso tras superar la última lesión. Valverde dio minutos a Sancet frente al Villarreal y anoche le colocó como titular en un encuentro que le podía ser favorable ante un Rangers que sufre en transiciones del rival y donde el navarro podía hacer mucho daño con su zancada y sus pases al espacio. Pero el desarrollo del partido jugó en su contra. El Rangers tuvo que replegarse al quedarse con diez y a Sancet se le vio demasiado poco para lo que necesitaba el Athletic en un encuentro tan trabado. Donde hacía falta claridad de ideas para buscar espacios el navarro no encontró soluciones y Valverde apostó por reemplazarle en la segunda parte, dando entrada a Berenguer.
Lo bueno y lo malo
Berenguer mejora al equipo pero falla el penalti
Iba camino de convertirse en el revulsivo del encuentro, en el futbolista rojiblanco diferencial en Ibrox, pero se quedó en el camino, cuando Kelly desvió con el pie su lanzamiento de penalti. La entrada de Berenguer sentó bien al Athletic, ya que su presencia por el costado izquierdo abrió una grieta en la defensa del Rangers que había vivido demasiado cómoda teniendo en cuenta que por ahí circulaba Nico Williams.
Pero Berenguer, más fresco, comenzó a asociarse muy bien con sus compañeros y firmó la jugada decisiva del encuentro, para bien y para mal. Primero marcó el desmarque a Vivián para romper la defensa en una jugada que terminó en penalti por mano de su par. Berenguer asumió el lanzamiento pero el guardameta estuvo acertado para despejar su disparo al centro de la portería.
Maroan tiene el remate #de la victoria
Valverde apostó en Ibrox por Maroan como delantero centro, dentro de la alternancia de partidos en la que viven el futbolista llegado desde el Barakaldo y Gorka Guruzeta, que anoche esperó turno desde el banquillo. Es cierto que Maroan estuvo muy activo y batallador con la férrea defensa del Rangers, pero no estuvo acertado de cara a portería.
Ya en la primera parte tuvo un doble remate en donde el segundo salió demasiado desviado. Pero fue en la segunda donde tuvo la oportunidad del partido. En una de las pocas veces donde el Athletic rompió por la banda al Rangers, De Marcos puso un regalo en forma de centro y Maroan, con todo a favor, mandó el balón fuera cuando ya celebraba su segundo gol con la camiseta rojiblanca. Poco después fue cambiado por Guruzeta y su gesto de desesperación sentado en el banquillo era más que evidente.
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