Muniain y De Marcos toman el testigo de Clemente y Dani
La Copa vuelve a alzarse en San Mamés cuarenta años después
No solo la gabarra es la única imagen que llevaba cuarenta años sin verse. También han pasado cuatro décadas en las que parecía un imposible ver a la Copa del Rey desfilar por el césped de San Mamés. Este domingo Muniain y De Marcos han cogido el testigo de Clemente y Dani, los dos últimos privilegiados en portar el ansiado trofeo para brindárselo a la afición rojiblanca en La Catedral.
Hay algunas diferencias en el acto de este domingo con respecto al vivido en 1984. La primera, el escenario. El antiguo San Mamés frente a la remodelada Catedral. Y el segundo, los protagonistas en primer plano. En aquella ocasión, fueron el entrenador Javier Clemente y el capitán Dani los encargados de llevar la Copa hasta el centro del campo. Ahora, el privilegio fue para los dos capitanes: Muniain y De Marcos. Valverde ha decidido ceder el protagonismo a sus jugadores.
Tampoco hubo pasillo del rival. Principalmente, porque no había. Como puede apreciarse en la imagen que acompaña a esta información. La plantilla del 84 acudió vestido de calle a San Mamés. Celebrar la Copa era el único motivo por el que acudían al estadio.
El guiño a los campeones de Copa de 1984 ha sido constante en estas celebraciones. Los actuales campeones vistieron de forma idéntica a aquel día en que la gabarra salió en 1984. Y este domingo han querido que los protagonistas de la anterior Copa les acompañasen en San Mamés, como también lo hicieron a lo largo de la ría.
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