De Marcos y Berchiche, dos veteranos cada vez más indiscutibles

Lo cierto es que Valverde no ha dejado de tenerla con De Marcos (35 años) ni con Berchiche (34). De hecho, si el capitán del Athletic renovó la temporada pasada –y quién sabe si volverá a hacerlo en esta– es porque su entrenador le considera una pieza vital y le quiere a su lado. Y del zarautztarra, aunque no tenga tanta ascendencia en el vestuario, se puede decir algo parecido. Los datos de la temporada demuestran que la jerarquía de estos dos jugadores, lejos de resentirse por un supuesto declive, se ha reforzado. El caso de Berchiche es realmente llamativo. Sin lesiones de por medio, su presencia en el once ha aumentado. Si el curso anterior sumó 711 minutos en los 18 primeros partidos que jugó el Athletic, ahora lleva 1.174. Vamos, que juega un 60% más.

El caso de De Marcos es similar, aunque con una cierta peculiaridad. Es cierto que está jugando un poco menos –960 minutos frente a 1.165 el curso pasado en los 18 primeros partidos–, pero que la reducción sea tan pequeña –de solo un 17,6%– no deja de reafirmar al futbolista de Laguardia. Al fin y al cabo, salvo lesión, como sucedió en el estreno liguero ante el Getafe, sigue siendo indiscutible en los partidos de perfil más alto. Las dos únicas excepciones serían los duelos europeos ante la Roma y el Ludogorets en los que le sustituyó Andoni Gorosabel, el fichaje destinado a aliviar el calendario del capitán rojiblanco. No se puede decir, sin embargo, que el lateral de Mondragón tuviera éxito. En ambos partidos, Valverde le acabó sustituyendo –en el minuto 56 contra los italianos y en el 69 ante el Ludogorets– para que De Marcos reactivase al equipo con su salida y contribuyera a remontar. Que es lo que hizo, efectivamente.

Este escenario obliga a una reflexión. Se mire como se mire, no es bueno que haya tanta diferencia entre los dos laterales titulares y sus suplentes. Y todavía lo es menos, claro está, cuando esos titulares son mucho más veteranos y uno de ellos lleva un par de años deshojando la margarita de su retiro. La pregunta surge de inmediato. ¿Podrán mantener De Marcos y Berchiche el nivel que están mostrando hasta ahora con un calendario tan exigente? En realidad, este interrogante encubre otro que plantea casi un dilema al Athletic: si Gorosabel, Lekue y Adama, los otros laterales de la plantilla, van a poder ser, cuando tengan que serlo, un relevo de garantías.

Atendiendo al criterio de los minutos, el siguiente al que hay que citar es a Iñigo Lekue (315 minutos). Con el bilbaíno, un clásico rojiblanco, también se puede hablar de incógnita. Y no porque sea un futbolista desconocido –después de diez temporadas es todo lo contrario– sino porque es una incógnita por qué Valverde ha decidido prescindir de él y no darle ni un solo minuto en los últimos nueve partidos, seis de Liga y tres de Europa. Se trata de algo extraño en un jugador que, salvo en las dos campañas que tuvo muy por delante a De Marcos y Capa, la 2018-19 y la 2019-20-, siempre ha intervenido mucho. De hecho, está sólo a dos partidos de llegar a los 250. Y queda hablar de Gorosabel (277 minutos), sobre quien no hay muchas dudas, la verdad. A sus 28 años, ya en su séptima temporada en Primera, ya es sabido que se trata, sin más, de un futbolista cumplidor, de esos que hacen fondo de plantilla pero en ningún caso alcanzan para ser el relevo deseado y natural de un futbolista como De Marcos.