Kike Barja: «Tuve una oferta del Athletic, pero decidí quedarme en Osasuna y no me arrepiento»

– Osasuna llega eufórico tras el 2-3 de Sevilla y el Athletic deprimido tras el 2-3 ante el Girona. ¿Qué influencia tendrá?

– Creo que ninguna. Lo que va a marcar el partido es como estemos los dos equipos y como salgamos.

– ¿Y cómo van a salir ustedes?

– Vamos a salir al doscientos por cien porque nuestra gente nos va a empujar mucho y nos va a hacer dar lo máximo para conseguir un buen resultado. La eliminatoria será larga, pero queremos ir con ventaja a San Mamés.

– ¿Dónde estará la clave de la eliminatoria?

– La clave es ver a un Osasuna competitivo, ambicioso y valiente. Es lo que deseo de mi equipo. No estamos acostumbrados a jugar semifinales y al Athletic la Copa se le da bien y tiene más experiencia, pero no tenemos que tener miedo porque no hay nada que perder. No tenemos ninguna presión. Llegar a semifinales es algo que hay que valorar mucho. Tenemos que jugar sin complejos, siendo valientes, ambiciosos y competitivos.

– ¿El Athletic sí tiene algo que perder?

– No es que tenga algo que perder, pero al ser un equipo más favorito, entre comillas, en esta competición puede sentirse más obligado a llegar a la final.

– A Granada y Levante les pesó verse en la semifinal ante el Athletic. ¿Tiene miedo de que les pase a ustedes?

– No tengo miedo, pero es verdad que hay que no estamos acostumbrados a partidos de estas características. Con el Sevilla en cuartos recuerdo que en la primera parte no estuvimos cómodos por cierta ansiedad. No tengo miedo a que nos pueda pasar factura, pero es verdad que debemos adaptarnos. Lo vivimos de esa manera, pero con naturalidad.

– ¿Es el partido más importante de su carrera?

– Probablemente sí. Pelear por entrar en una final es superespecial para mí siendo de casa.

– Debuta la campaña del último descenso y desde entonces es testigo directo del crecimiento del club.

– He tenido la suerte de que la progresión es ascendente, aunque el primer año con Diego Martínez no subimos. Vino Jagoba Arrasate, lo hicimos y llevamos tres años en Primera. No podía pedir más.

– ¿Dónde está el techo de Osasuna?

– No lo sabemos, pero sabemos que nuestra realidad es mantener al equipo en Primera. Si nos da para otras cosas, como entrar en la final de Copa o ir a Europa, es un plus. Tenemos que tener los pies en el suelo, tener cabeza y ser humildes porque nuestra realidad es distinta a la de los otros tres semifinalistas. Pero eso no quiere decir que no seamos ambiciosos. No me gusta perder por falta de ambición. Si por lo que sea no pasamos o el Athletic es mejor y nos gana, quiero ver por lo menos ver un Osasuna competitivo y con hambre de ganar, pero no a un Osasuna con mucho respeto, con mucho miedo, con una mochila que no nos corresponde.

– ¿Qué es lo que más la gusta del Athletic?

– Es un equipo que defiende bien, que le generan poco y que arriba tiene muchos jugadores con gol, con mucho pase... Le meten además mucho ritmo. Es un equipo muy completo y con mucho nivel.

– ¿Cómo va a estar El Sadar?

– Va a ser una olla a presión. La grada nos va a empujar muchísimo. En el partido de cuartos ya se notaba que era un partido diferente. La gente llegó antes, animó desde el calentamiento... La gente tiene mucha ilusión porque quiere a su equipo en una final 18 años después.

– Lleva 17 años en Osasuna. ¿Le gustaría irse?

– Me gustaría hacer toda mi carrera aquí. Me encanta mi ciudad, mi equipo, mi estadio. Soy feliz aquí. Lo tengo todo. No podría pedir nada más.

– Se le colocó en la órbita del Athletic. ¿Hubo algo?

– Tuve una oferta importante.

– ¿Cuándo?

– Era cadete. Tendría 15 años. Fue una oferta real que me gustó porque te hace ilusión que un equipo te quiera fichar. Fueron unos meses convulsos porque tuve dudas porque la oferta del Athletic era interesante. Pero el club hizo una apuesta importante por mí y me tiró ser de aquí, ser de Osasuna y que el club diera un pasito para que viera que realmente querían que me quedara. Decido quedarme aquí y no me arrepiento.

– En realidad me refería a otro momento, en 2018 cuando ya estaba en el primer equipo.

– Se habló, pero a mí no me llegó nada. Tenía una cláusula muy baja, de un millón. El club se cubrió al ejecutar una cláusula unilateral para subirla a cuatro. Era lo que oía por fuera. La única oferta real que he tenido del Athletic fue en cadete. Me quedé y me ha ido bien.

– Su gesto con el joven fallecido por leucemia indica que no es el típico jugador que vive en una burbuja.

– Dentro del fútbol hay burbujas y burbujas. No son lo mismo las del Real Madrid, Barcelona, Atlético o incluso Sevilla que las de equipos más humildes, como Osasuna. O Incluso pasa en la cercanía con Athletic, Real Sociedad, Alavés o Eibar. Somos más humildes y más naturales que lo que la gente piensa. En casos así no cuesta nada hacer algo, que hacemos además encantados. Y es bueno que le gente vea que somos personas normales y corrientes que vamos a lo Viejo a tomarnos un pincho. La gente mucha veces ve más distancia de la que hay.