Hacía tiempo que San Mamés no disfrutaba de una tarde tan plácida. Probablemente desde que se dejaron de jugar a doble partido las primeras eliminatorias ... de Copa, cuando los jugadores visitantes venían más pendientes de sacarse fotos en la catedral que de hacer el calentamiento. No diremos que los suecos del Elfsborg vinieron a hacerse fotos a San Mamés, pero sí que el equipo que vimos este jueves tendría bastantes problemas en Segunda División.
Publicidad
Ocurre que el Elsfborg tiene cuatro puntos sumados por una victoria ante la Roma y un empate contra el Braga, ambos en su feudo. Pero es que marcaron dos y tres goles respectivamente para perder en Alkmaar y en el campo del Galatasaray. ¿Cómo pudo suceder? Quién lo sabe. Cosas del fútbol seguramente, pero también cuestión de calidad de los rivales. Si utilizamos el calibre Elfsborg como medida, está claro que el Athletic está por encima de todos los señalados. La clasificación en la quinta jornada lo confirma.
Noticias relacionadas
Sin ningún ánimo de minusvalorar al rival y sin ápice de forofismo, el partido ante los suecos se presentaba como una ocasión ideal para seguir sumando, afianzarse en el grupo de los ocho mejores y, a ser posible, seguir mejorando la diferencia de goles por si los empates a última hora. El Athletic logró con holgura los dos primeros objetivos pero quedó flotando en el aire la sensación de que, de haber apretado con ganas, hubiera sumado un saco de goles en su casillero. La cosa quedó en un marcador que no está nada mal, pero pudo ser mejor.
Todo fueron buenas noticias en una tarde apacible, de temperatura agradable y horario razonable para recogerse en casa a una hora prudente o celebrar el triunfo con los bares abiertos, los más eufóricos. El Athletic se encontró con un rival bastante marmolillo e inocente como, a estas alturas, solo puede serlo todavía un equipo escandinavo. Ni una mala patada dieron los suecos para tratar de romper una dinámica de partido que los llevaba directamente al desastre, como ocurrió finalmente, y, que, ya está dicho, pudo ser mucho peor si el Athletic les hubiera apretado algo más.
Publicidad
Las buenas noticias comenzaron con el retorno de Unai Simón. Valverde debió de considerar que el partido sería más tranquilo que el que espera en Vallecas para que el portero volviera a sentir la sensación de ocupar su puesto de trabajo. Si fue así, acertó de pleno; Unai no tuvo prácticamente necesidad de utilizar las manos en todo el partido.
Siguiendo de atrás hacia adelante, Adama Boiro fue la segunda noticia de la tarde. Se estrenó como goleador culminando un saque de esquina ensayado, que empezó Nico y continuó Guruzeta, para que el chaval rematara a placer. Que el Athletic marque en un saque de esquina ensayado ya es noticia por sí misma y da una somera idea del nivel defensivo del rival. Adama, además, dio el pase para que Guruzeta marcara el tercero de la tarde tras llevarse el balón con el pecho en un buen gesto técnico. Estuvo bien el chaval, pero ya sabemos que el mejor calibre para estas cosas es el rival, y el de esta ocasión no es un instrumento fiable para medir nada.
Publicidad
También Prados se encontró por fin con el gol después del par de ocasiones falladas en los últimos partidos. Lo estaba buscando con sus llegadas desde la segunda línea y ayer lo encontró conectando un bonito cabezazo que le tiene que servir para ganar serenidad de cara a ocasiones futuras, que las tendrá.
Por terminar con las buenas noticias, se puede decir que los de arriba no tuvieron que desgastarse demasiado para superar las líneas rivales. Nico Williams trajo de cabeza a su lateral todo el partido hasta que fue sustituido. Y el mismo camino anticipado hacia el vestuario siguieron un Sancet que se movió a placer, Iñaki Williams y Ruiz de Galarreta.
Publicidad
A estas alturas, las oportunidades de ganar sin desgastarse se pueden contar con los dedos de una mano. Aprovecharlas es fundamental para mantener las opciones en todas las competiciones. El Athletic hizo los deberes y ya solo le queda culminar su excelente trayectoria europea amarrando un puesto entre los ocho primeros para ahorrarse una eliminatoria. Lo tiene a mano y hay que celebrarlo porque el domingo será otra historia. En Vallecas no habrá suecos.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión