

Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Igor Barcia
Sábado, 10 de mayo 2025, 01:46
La eliminación en la Europa League deja al Athletic con un claro objetivo para cerrar la temporada. Conquistar plaza para jugar la Champions es el ... gran reto que se le presenta a los rojiblancos en el sprint final de la Liga, cuatro partidos en dos semanas que suponen el último esfuerzo de una plantilla que ya ofrece claros síntomas de fatiga pese a las rotaciones y la dosificación de minutos que ha implantado el cuerpo técnico.
51 partidos disputados a un elevado ritmo de revoluciones como marca el estilo de juego del Athletic de Valverde pasan factura tanto a nivel físico como mental, reflejo de lo que ha sucedido esta semana tanto en la previa del duelo de Old Trafford como en el desarrollo del mismo. Tres futbolistas fundamentales en el once del equipo fuera de concurso por diferentes problemas físicos y un Athletic fundido fisica y mentalmente en el tramo final del duelo ante el United muestran que el esfuerzo acumulado por el equipo rojiblanco se deja sentir en este mes de mayo. «La temporada no sale gratis y tantos partidos conllevan problemas», resumió Valverde antes del duelo de vuelta de semifinales.
En el cuerpo técnico rojiblanco se tiene la evidencia de que después de una temporada a gran nivel en todos los aspectos, algunas de las piezas fundamentales de este Athletic han llegado al último mes con las luces de emergencia encendidas. No es casualidad que dos de los tres jugadores con más minutos acumulados de la plantilla como son los hermanos Williams se hayan lesionado y se quedaran fuera de la semifinal de Old Trafford. Iñaki se ha acercado esta temporada a los 4.000 minutos de juego –suma 3.722 ahora mismo– y ha sido un futbolista que ha acumulado esfuerzos sin descanso, un portento físico que la pasada semana dijo basta. Una «lesión muscular en el tendón conjunto de la musculatura isquiosural derecha», según el parte médico, le dejó fuera de la convocatoria para Old Trafford y ahora trabaja para recuperarse de cara al sprint de cuatro partidos que le quedan al Athletic para bajar la persiana de la temporada 2024-25.
Y lo mismo sucede con Nico Williams, con una pubalgia que le ha obligado a jugar con dolores hasta que tenido que parar. El pequeño de los hermanos ha pasado de los 3.000 minutos jugados y no hay que olvidar que a la pasada temporada unió un verano en la Eurocopa, lo que no ayudó en su descanso para afrontar una campaña tan exigente como la actual. En el caso de Sancet, el navarro apura la recuperación de su sexta lesión del curso, y el deseo de Valverde es poder contar con los tres desde ya mismo, desde el duelo de mañana frente al Alavés donde los tres puntos son fundamentales para mantener a raya a Villarreal y Betis en la carrera por la Champions.
Más rotaciones
Contar con ellos permitiría a Valverde tener, además de a sus tres futbolistas-referencia de la plantilla, más piezas para alternar y repartir cargas en los duelos ante Alavés, Getafe, Valencia y Barcelona. Porque además de los Williams y Vivián, que superan la frontera de los tres mil minutos de juego, hay otros jugadores que pueden terminar el curso por encima. Es el caso de Berenguer (2.911), Jauregizar (2.849), Yuri (2.671) y Paredes (2.612). Los dos primeros son dos ejemplos de futbolistas que empiezan a pasar apuros para mantener el gran rendimiento que han ofrecido a lo largo de la temporada.
Berenguer, que empezó el año con dudas por la acumulación de efectivos en la delantera tras el fichaje de Djaló, se ha convertido en un indispensable para Valverde por su capacidad de adaptación a todas las posiciones del ataque, al punto de ser el cuarto jugador de la plantilla en minutos. Una virtud que también conlleva un problema, ya que apenas está pudiendo tener respiro al ser el encargado de cubrir las ausencias de Sancet o Nico Williams. Tambien Jauregizar acusa la acumulación de partidos. Pese a que en Old Trafford tiró del equipo hasta que las fuerzas le dieron, no hay que olvidar que ha pasado de jugar un centenar de minutos con el primer equipo a ser el quinto jugador más utilizado por su entrenador. Pero con Galarreta en una versión más secundaria que la del pasado año y Prados también un escalón por debajo de lo demostrado en la 2023-24, a Jauregizar se le acumula el trabajo este año, y también la fatiga.
Quedan cuatro partidos, dos semanas de competición, y la principal preocupación de Ernesto Valverde y el cuerpo técnico rojiblanco es ser capaces de lograr que el Athletic llegue a buen puerto. Que el equipo no se caiga fisicamente para atar esa plaza Champions por la que tanto se ha peleado. Y sacar conclusiones de cara a futuro, porque la temporada que viene será todavía más exigente si se logra el premio gordo.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.