Otro tortazo de guion similar

Como hizo hace unos días frente al Granada, Antonio Sivera volvió a detener un penalti. Esta vez, con la fortuna añadida de que el rechace no terminó en gol del rival. Contra el Tenerife aguantó de pie en el medio para frenar a Enric Gallego. Esa estadística también evidencia que al Alavés le llegaron, de nuevo, demasiado. Ya era así cuando Sivera tuvo que actuar, si bien su acierto logró mantener por el momento el empate del equipo. Pero el escenario no era en absoluto prometedor para un Alavés al que siempre le tocó defender y que no pudo rentabilizar otra buena actuación de su guardameta.

El primer gol del Tenerife, lejos de espolear una reacción del Deportivo Alavés, no hizo más que consolidar el guion de partido que ya se estaba viendo desde hacía varios minutos. El equipo vitoriano continuó siendo inferior, sin encontrar recursos para hacer daño. Es más, el Tenerife mantuvo el control del partido y ya en la segunda parte marcó un gol que le dio tranquilidad durante muchos minutos, hasta que Sylla recortó distancias.

Como en Granada, al Alavés se le terminó de complicar el partido tras un contragolpe local en el que el Tenerife encontró su segundo gol. Demasiado fácil ante un bloque defensivo que dejó muchos huecos y que no logró frenar por dos veces al ataque local en la acción. El tanto castigó el irracional atrevimiento de un Alavés que se había lanzado a empatar más en cantidad que con calidad y claridad de ideas. A partir de ahí, solo el afortunado gol de Sylla dio algo de aire a un Alavés que llegó al final vivo, pero sin excesivos argumentos en liza para empatar.

En una noche gris, Mamadou Sylla protagonizó una de las pocas buenas noticias para el Deportivo Alavés. Ya de por sí, su vuelta tras tres meses y medio de ausencia por lesión trajo aire fresco al equipo en un partido cerrado y sin ocasiones albiazules. Pero, en especial, para una posición tan precaria como la delantera. El senegalés volvió, además, con gol. Un tanto, su segundo de la temporada en apenas cuatro encuentros, que mantuvo vivas durante unos minutos las opciones albiazules. Con él, Luis García encuentra un delantero de perfil muy diferente a los de Miguel y Hara, pero que ya se ha demostrado útil en el contexto de Segunda. También tuvo minutos Abde, a menos en las últimas jornadas.

El Deportivo Alavés atraviesa su bache más profundo de la temporada. Breve, de momento, pero más preocupante por las sensaciones de los dos últimos partidos y por cómo llegaron ambas derrotas. El segundo cero consecutivo puede tener, sobre todo, resonancias clasificatorias. Aunque depende del resto de rivales, que juegan hoy. Si el Burgos derrota al Eibar, el ascenso directo se quedará a un punto y el cuadro burgalés -nuevo líder-, a tres. Si ganan los armeros, tocarán los talones vitorianos, con solo un punto de desventaja. Más parejo sería en el caso del Levante, próximo rival albiazul. Si derrota en casa a la Ponferradina, ambos equipos llegarán al partido de lunes empatados a puntos. El Alavés, cuarto por la diferencia de goles respecto a los granotas.