18 de agosto de 1929.
Historias en albiazul

Homenaje en Miranda

historias en albiazul ·

El Mirandés-Alavés ya tuvo un antecedente en 1929. El 18 de agosto se enfrentaron una selección de Miranda-Haro contra el Koipe Junior, formado por exalbiazules, en un amistoso

Miércoles, 25 de enero 2023, 14:41

Las conexiones futbolísticas entre Vitoria y Miranda de Ebro son incluso anteriores a la propia fundación del Deportivo Alavés y el Club Deportivo Mirandés en ... 1921 y 1927, respectivamente. Esta estrecha relación es lógica dada la cercanía geográfica entre las dos ciudades y sus vínculos históricos. Uno de los encuentros más emotivos entre mirandeses y vitorianos tuvo lugar en el antiguo campo de la estación de Miranda el 18 de agosto de 1929. Su protagonista por parte babazorra no fue el Alavés sino el Koipe Junior, formado por antiguos jugadores albiazules, aunque algunos todavía estaban en activo, que se enfrentó a una «Selección Miranda-Haro».

Publicidad

El choque era un homenaje a Ramón García, 'El Alpargatero', «impulsor del fútbol en Miranda», que había tenido que retirarse de la actividad deportiva por una lesión producida durante un entrenamiento. García, «muy popular y querido de los deportistas vitorianos», había sido «traído urgentemente a Vitoria para que le fuera extirpado un riñón a causa del accidente sufrido jugando al fútbol». Además, con ese partido se trataba de «ayudar a su club a sufragar los cuantiosos gastos –varios miles de pesetas– que el percance ocasionó».

La formación de los Koipe de hace un siglo en Mendizorroza. archivo municipal de Vitoria

Tal y como él mismo relataba en una entrevista en 'Diario de Burgos' con motivo de su homenaje, García había nacido en San Sebastián, donde había hecho sus pinitos futbolísticos en el Racing de Amara en 1912-13. En 1914 estableció su residencia en Miranda de Ebro, «encontrando al fútbol tan en mantillas que se podían contar con los dedos de una mano los elementos que en esta ciudad lo practicaban», aparte de los estudiantes internos del colegio de los Sagrados Corazones. Al principio no hubo muchos frutos. «Fueron años amargos de principiantes, recibiendo serias derrotas de equipos de Vitoria y principalmente del colegio».

En 1919, García y los suyos formaron el Sporting Mirandés, que en una ocasión logró vencer 3-0 al Deportivo Alavés, hazaña que todavía en 1929 el homenajeado consideraba «la mayor satisfacción de su larga carrera futbolística». Después, 'Ramonchu' había pasado por dos efímeros clubes mirandeses, el Unión Club y el Blanco y Negro, y por el Haro Sport Club, antes de recalar en el recién fundado C. D. Mirandés. Sin embargo, en la primavera de 1929, «cuando con más entusiasmo me preparaba para próximos encuentros, un estúpido y serio accidente me cortaba para siempre todos mis entusiasmos».

Publicidad

Alineación del Mirandés de la década de los 20. miranda deportiva

García tenía tan buena relación con el Alavés que los exjugadores albiazules del Koipe estuvieron encantados de participar en el homenaje de agosto de hace 94 años. Recordaban también cómo había sido «el pueblo de Miranda el que tantas veces acogió a los jugadores alaveses con generales manifestaciones de cariño». Por parte vitoriana formaron la expedición Sagarna, Alberdi, Cano, Lorente, Modesto Echevarría, Indalecio, Juanito, Espada, Castresana, Quincoces, Cabezas, Valdecantos, Sánchez y Urquijo. El árbitro fue otro antiguo babazorro, Francisco Goicoechea.

La caravana albiazul llegó a Miranda acompañada por txistularis y fueron acogidos por la banda municipal de la localidad del Ebro en una «entrada apoteósica». Hizo de anfitrión el presidente del Mirandés, el notario Arturo García del Río. El saque de honor lo hizo el famoso delantero del Athletic de Bilbao e internacional español José María Belausteguigoitia, que protestó con gracia porque «esta operación suelen realizarla generalmente personas que tienen las rodillas reumáticas». El Koipe, «ese grupo de viejas glorias de nuestro Deportivo Alavés», derrotó a los locales por 1-6 demostrando que «aún les queda a estos joviales compañeros mucha salsa para manejar el balón». Después del partido hubo un banquete en la fonda de la estación y un baile hasta el anochecer. Quedó claro el afecto de todos por García, «que ha sido siempre un buen muchacho, un correcto 'sportman', que supo conquistar infinidad de afectos, que cristalizaron en el concurso que prestaron esas viejas glorias».

Publicidad

Ramón García, primer presidente del Mirandés y homenajeado en aquel partido. miranda deportiva
Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad