El Comité rechaza el recurso del Alavés y sanciona con un partido a Antonio Blanco
Disciplina argumenta que las imágenes aportadas por el club albiazul no contradicen que fuera ocasión manifiesta de gol e impone un partido de sanción al centrocampista
El Comité de Disciplina de la Federación Española desoye la queja del Deportivo Alavés. Ha rechazado el recurso presentado por el club albiazul por la tarjeta roja que vio Antonio Blanco ante Osasuna y, consecuentemente, impone un partido de sanción al centrocampista albiazul, que no podrá jugar el domingo ante el Betis salvo que prospere un hipotético recurso posterior que la entidad vitoriana está valorando presentar ante Apelación. Además de la consiguiente multa de 350 euros al club y 600 al jugador.
No ha sido ninguna sorpresa en el seno de la entidad vitoriana, consciente de la dificultad de que su recurso saliera adelante. Primero, por el propio funcionamiento del proceso. Las alegaciones deben evidenciar que el acta del colegiado contradice lo que ocurrió en el terreno de juego. Figueroa Vázquez escribió que la tarjeta roja directa fue por evitar una acción manifiesta de gol y, pese a que en el momento de la acción el balón está más cerca de Antonio Sivera que del delantero osasunista, el Comité de Disciplina entiende que las pruebas videográficas no demuestran «la existencia de un error material manifiesto en la descripción arbitral de la acción».
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«Únicamente la prueba de un error material manifiesto puede desvirtuar la apreciación realizada por el colegiado y, en consecuencia, la veracidad de lo que hizo constar en el acta. Es necesario en todo caso que se trate de un error claro o patente, independientemente de toda opinión, valoración o interpretación, circunstancias que no se dan en este caso. Las imágenes aportadas por el club no permiten desvirtuar el relato arbitral: el derribo, que evita a juicio del árbitro una ocasión manifiesta de gol, del que es autor el jugador expulsado», dice el Comité.
Retirar la tarjeta, además, supondría reconocer el error del colegiado y, lo más grave, del VAR. Y, con ello, el claro perjuicio contra un equipo. No es fácil que prospere un recurso, salvo por un error de forma en la redacción del acta. «La tarea de este órgano disciplinario es determinar, en su caso, la existencia de un error material manifiesto en la descripción arbitral de la acción. No se extiende a la reconsideración de extremos que, como el de la temeridad de una acción o la existencia de una ocasión manifiesta de gol, supondría que este Comité rearbitra y en esa medida sustituye la tarea de los colegiados», expone Disciplina.
«No es ni siquiera falta»
«Creo que no es falta tan siquiera», afirmó Luis García Plaza tras el partido. Incluso el entrenador de Osasuna, Jagoba Arrasate, expresó sus dudas sobre que esa acción de Blanco sobre Arnaiz fuera merecedora de expulsión, pero el Comité no entra en valoraciones ni interpretaciones, por claras que parezcan, sino que se limita a escrutar la redacción del acta y, salvo error flagrante, respetar la decisión del colegiado de turno.
Decisiones que no están sonriendo al Alavés en este inicio liguero. A la polémica expulsión de Blanco que decantó el derbi ante Osasuna se suman quejas anteriores como el claro penalti no pitado a Guridi en Getafe, la controvertida pena máxima a favor del Rayo en Vallecas o la no revisión de la última jugada del partido de Vigo, cuando Tapia arrolló a Luis Rioja dentro del área. El club albiazul ya ha manifestado su malestar ante los organismos pertinentes.
